Al menos 53 personas murieron y 62 resultaron heridas tras un terremoto de 6,8 grados de magnitud registrado este martes en el Tíbet, provocando el derrumbe de más de 1.000 viviendas. El sismo se produjo a las 09:05 hora local en la prefectura de Shigatse, a una profundidad de 10 kilómetros. 

Tras el temblor, las autoridades chinas pusieron en marcha un dispositivo de urgencia y enviaron un grupo de trabajo a la zona para orientar labores de socorro. Según la cadena estatal CCTV, más de 1.500 efectivos de bomberos han sido movilizados para tareas de búsqueda y rescate de supervivientes. 

El condado de Tingri, ubicado a los pies del Himalaya, está afectado por temperaturas extremas que oscilan entre 16 grados bajo cero y 3 grados. El monte Everest ha sido cerrado al público por seguridad. 

Tíbet y otras zonas del oeste de China son propensas a terremotos debido a la fricción de la placa tectónica asiática con la india, con frecuencia en áreas poco habitadas.