Venezuela rompió relaciones políticas y diplomáticas con Panamá
El conflicto se produjo cuando la nación centroamericaná propuso una reunión en la Organización de Estados Americanos para debatir el tema de las protestas en el país sudamericano.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, rompió este miércoles las "relaciones políticas y diplomáticas" y "congeló" los nexos comerciales con el gobierno de Panamá por haber propuesto una reunión en la Organización de Estados Americanos (OEA) para debatir el tema de las protestas que afectan al país sudamericano.
"Frente a la conspiración abierta del embajador del gobierno panameño en Washington en la OEA he decidido romper relaciones políticas y diplomáticas con el gobierno actual de Panamá y congelar todas las relaciones comerciales y económicos desde este momento", dijo Maduro durante una ceremonia de conmemoración del primer aniversario de la muerte de Hugo Chávez.
"Nadie va a conspirar impunemente para pedir una intervención contra nuestra patria, ¡ya basta! Llamo al pueblo a unirnos", agregó el mandatario en un encendido discurso.
A solicitud del gobierno panameño, la OEA, con sede en Washington, anunció este miércoles que el jueves celebrará una reunión privada para decidir si llama a los cancilleres para buscar soluciones al clima de protestas en Venezuela.
"El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), por decisión de su presidencia, se reunirá en Sesión Privada el jueves 6 de marzo de 2014", señaló el organismo en un comunicado.
En un acto previo por la mañana también en homenaje a Chávez, Maduro ya advirtió que no permitirá ninguna injerencia en Venezuela de la OEA.
"Voy a responder con fuerza y contundencia cualquier intento de cualquier gobierno de América de meterse en los asuntos internos de Venezuela, no acepto intervencionismo en el país", declaró.
Venezuela cumple un mes ininterrumpido en alerta por una ola de protestas antigubernamentales contra la galopante criminalidad, la alta inflación y la recurrente escasez de bienes básicos.
Las manifestaciones, las mayores desde que Maduro fue electo en abril, han dejado 18 muertos, 260 heridos y decenas de denuncias
de violaciones de los derechos humanos.