El presunto asesino de Yasmín Chacoma admitió que la violó pero que no la mató
Miguel Pallalaf, el sospechoso, llevaba 4 meses prófugo y figuraba en el registro de personas vinculadas a delitos sexuales.
El presunto asesino de Yasmín Chacoma, Miguel Pallalaf, admitió ante la policía que violó a la nena de 11 años cuyo cuerpo fue encontrado en un descampado de esta ciudad en septiembre pasado, pero en su versión aseguró que no la mató. "A mi me la entregó un tipo al que llaman 'el loco'", declaró ante la justicia, según anticipa en su edición el diario Jornada de Chubut.
Además, admitió que volvió a la escena del crimen con su compañero de cuarto de la pensión en la que se alojaba cuando la policía encontró el cuerpo para ir a "ver qué pasa". Allí observó el movimiento policial en el predio de LU4, donde fue encontrado el cuerpo sin vida de la menor que llevaba 48 horas desaparecida, luego de que su madre la mandó a comprar algunos productos a una sucursal cercana de La Anónima.
Pallalaf -quien había sido condenado por dos violaciones anteriores y figuraba en el registro de personas vinculadas a delitos sexuales de esta provincia- gozaba de salidas transitorias otorgadas por el juez de Trelew Fabio Monti. No obstante, en una de de las salidas nunca regresó y se trasladó a Comodoro, lugar en donde residía cuando ocurrió el crimen de Yasmín Chacoma. Llevaba hasta ese momento 4 meses prófugo de la justicia.
Pallalaf fue detenido este martes en Puerto Madryn tras ser reconocido por dos policías mientras caminaba por calle Lugones. Es el principal sospechoso de la violación y muerte de Yasmín en un hecho ocurrido en Comodoro. La fiscal que investiga el caso, Liliana Ferrri, aseguró la semana pasada que son dos los perfiles de ADN encontrados en el cuerpo de la menor. Según aseguró, se encontraron muestras y semen de Pallalaf en el cuerpo de la nena, en la bolsa y la soga utilizada para matarla. No obstante, el cuerpo registraba un segundo perfil "incompleto" de sexo masculino.
El día que encontraron el cuerpo de Yasmín, Pallalaf volvió al lugar del crimen y después regresó a la pensión. Se había mudado allí hacía un par de semanas cuando la policía lo desalojó del edificio en construcción de la Ciudad Judicial. Estaba alojado allí escapando de la justicia. En aquel momento la policía no lo reconoció y Pallalaf se fue a vivir a una pensión en inmediaciones de las 1008 viviendas, el lugar donde vivía junto a su madre y hermanos Yasmín Chacoma.
Según la reconstrucción de Jornada, tras cometer el hecho, Pallalaf regresó al albergue "Mireya" ubicado a pocas cuadras de donde apareció la nena. Tenía los zapatos embarrados y la camisa y el pantalón mojados. "Me quisieron robar y tuve que defenderme. Me revolqué por el suelo y por eso estoy así", le dijo a uno de sus compañeros de pensión.
Pallalaf dijo que a su posible cómplice lo conocía sólo por el apodo y que no sabía donde vivía. Tras el crimen, el ahora detenido e imputado en el crimen se trasladó a la terminal de Comodoro donde sacó un pasaje para Esquel utilizando su nombre y apellido verdaderos. Luego, según relató la fiscal Ferrari, viajó a Cipoletti y finalmente a la Villa 31, donde quedó alojado en un albergue.
La justicia reconstruye, además, su regreso a Chubut, donde finalmente fue interceptado por dos policías..