El Gobierno destituyó al interventor de Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT), una de las empresas estatales que, de acuerdo con la Ley Bases, está bajo la posibilidad de ser privatizada. Esta decisión se da en el contexto de un escándalo relacionado con la supuesta solicitud de coimas.

Thierry Decoud había sido funcionario del PRO y mantenía una relación de amistad con un intermediario que está siendo investigado por las acusaciones de corrupción. El vocero presidencial, Manuel Adorni, enfatizó que, en situaciones donde se detecten faltas de transparencia en la gestión, el Presidente optará por apartar a los responsables, no necesariamente por su culpabilidad, sino por el compromiso del Gobierno de mantener una gestión completamente transparente. En cuanto a las acciones futuras, Adorni mencionó que se espera que en las próximas horas se den a conocer novedades sobre la administración de los yacimientos de carbón. 

La situación se complica aún más con la propuesta de compra que la compañía de capitales israelíes TEGI Limited había realizado a YCRT, en la que ofrecían adquirir 30.000 toneladas de carbón de baja calidad por un valor aproximado de 2,1 millones de dólares. Sin embargo, la operación se vio frustrada debido a un pedido de coimas que surgió en las negociaciones.

A pesar de que se estaban ultimando los detalles para cerrar la operación en junio pasado, la misma no se concretó debido a las irregularidades cometidas por Andrés Gross, un intermediario que, según se desprende de un audio de una reunión por videoconferencia, solicitó un monto adicional al representante de TEGI en Argentina, Juan Agustín Yarke Ariet, para continuar con el proceso de negociación.

Por Continental, Graciela Ocaña, legisladora porteña y presidenta de Confianza Pública, celebró “que el Gobierno de Milei haya echado al interventor de Yacimientos Río Turbio”, pero lamentó “que no haya hecho rápidamente la denuncia. Estos personajes adujeron tener los contactos en esa comunicación de la empresa para poder adjudicar o no un negocio que era bueno para la empresa para sanear su déficit histórico”, puntualizó en Bravo.Continental.