En diciembre del 2012 se terminaría el mundo, según una teoría del Imperio Maya y crecen las reservas turísticas en torno a esa fecha, en el sitio donde vivió esta civilización aborigen. Sin embargo, muchos científicos rechazan de plano esta supuesta predicción.

“No debemos preocuparnos, el mundo no se va a acabar. Ningún investigador serio lo cree”, dijo Rodrigo Liendo, arqueólogo del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la Universidad Autónoma de México.

Para el especialista, esta idea “surgió alrededor de mediados de los ’70, en el seno de los grupos ‘New Age’”.

En ese sentido, aclaró, “los Mayas no tenían una forma lineal de concebir el tiempo como nosotros, que tomamos como fecha 0 el nacimiento de Cristo”.

“Ellos tenían una forma cíclica de ver el mundo y los ciclos se acaban”, subrayó Liendo.