Los precios de los alquileres se ubicaron en junio 25,4% por encima del mismo mes del 2013 en promedio, y el precio de los departamentos retrocedió 1,33% en igual período, en la Ciudad de Buenos Aires.
Esos valores corresponden a unidades de uno y dos ambientes, que son las más buscadas en el mercado, mientras que las propiedades medianas de 3 y 4 ambientes registraron un descenso del 1,8% anual en el segmento vendedor.
Los departamentos grandes (5 ambientes o más) siguieron por el contrario una trayectoria alcista, acumulando una suba de 3,07 por ciento en los últimos doce meses, impulsada especialmente por las unidades de cinco ambientes y más con cochera y amenities.
Así lo indicó a "La mirada despierta" por Continental Roberto Arévalo, Presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, entidad que describe un panorama económico sombrío para el corto plazo por la incertidumbre que atraviesa el sector desde hace casi tres años y que ahora se agrava por el riesgo de default.
La oferta de departamentos en alquiler aumentó 4,4% en junio en comparación con el mismo mes de 2013 y los precios (para las propiedades de uno y dos ambientes) avanzaron un 2,6% en la comparación mensual y 25,4% en el último año.
Los alquileres del segmento intermedio -que ofrece departamentos de 3 y 4 ambientes- registraron un alza del 27,48% promedio, "más cercano a las mediciones de la inflación difundidas por el Congreso de la Nación", remarcó.
Los precios promedio de las propiedades continúan por debajo de los niveles del año pasado, pero en mayo mostraron una recuperación que se confirmó en junio con un mínimo alza del 0,17 por ciento, respecto del mes anterior.
Arevalo adjudicó ese rebote a la combinación entre la devaluación de enero (que alcanzó casi el 20 por ciento en tres ruedas cambiarias), una inflación persistente y un tipo de cambio relativamente calmo.
Al describir el escenario económico, planteó por Continental que tanto la Capital como el país atraviesan "un panorama incierto para el futuro cercano (incluyendo el riesgo de un nuevo default), en un contexto de inflación y devaluación".
En ese sentido, señaló la pérdida de capacidad de compra por parte del público masivo, valores de oferta (de propiedades) estables en dólares, junto a un dólar firme que tiende a la suba; ausencia de crédito y construcción en baja".
En ese sentido, la entidad señaló que el mercado inmobiliario viene funcionando desde hace varios meses "a la mitad" de lo que lo hacía años atrás, aún cuando ya entonces operaba con foco en un recorte de la demanda.
De acuerdo con los datos del Colegio de Escribanos, en mayo de 2014 se concretaron 2.898 escrituras, lo que equivale a 725 por semana cuando en los cinco años anteriores al cepo cambiario, el promedio para este mes era de 1.426 por semana.
Esos datos citados por el informe de la Cámara Inmobiliaria indican que el mercado sigue marchando a un ritmo 49 por ciento inferior a su dinámica previa.
"A nivel macro las lecturas se vuelven reiterativas, sin que nada anticipe un cambio estructural en poco tiempo. La necesidad de un cambio de condiciones en el escenario de negocios, ya es innegable. Pero ningún actor o sector puede hacerlo por sí solo", dijo.
La entidad que agrupa a las inmobiliarias de todo el país se preguntó "cuánto más hemos de esperar para recuperar la capacidad de articular proyectos de conjunto, de reconstruir capital social: de jugar en equipo".