El ejemplar, una hembra de unos cinco años de edad, fue visto por primera vez cerca de las 4:30 de la madrugada en una vivienda situada en Suipacha al 700, de esa ciudad del este de Córdoba.

Después de asustar a varios vecinos, finalmente la dueña de la casa llamó a la Policía y los Bomberos al ver al felino paseando por el jardín.

Cuando llegaron efectivos policiales al lugar, el puma se asustó y saltó una tapia, por lo que se inició un intenso operativo que involucró al Grupo Especial de Rescate y Salvamento (GERS), que tiene sede en la localidad de Miramar.

Finalmente, la hembra de puma fue atrapada cerca de las 9:30 cuando se había refugiado bajo neumáticos viejos, en un taller mecánico abandonado.

El agente de Fauna Sixto Ferreira opinó que el puma, que tiene unos 80 centímetros de alto y pesa unos cien kilos, tenía marcas de que había estado en cautiverio, ya que "tiene algunos rastros de que ha estado en una jaula".

Ferreira comentó que ya son 58 los pumas recuperados en la zona en los últimos años.

El puma fue trasladado a la reserva de Miramar, para su recuperación.

El primero de abril pasado dos cachorros de cuatro meses fueron rescatados tras vivir en el balcón de un departamento y luego en el patio de una casa de Córdoba capital.

El hombre que los tenía, que les habría proporcionado buenos cuidados, dijo que rescató los cachorros en Formosa, donde había a trabajar, luego de darse cuenta de que su madre había muerto. 

Además, sostuvo que estaba intentando dar con la oficina correcta para entregar los animales en el momento del operativo.