El guarda Fernando Costa dijo hoy a en el juzgado que encabeza Ariel Lijo que la formación que conducía Julio Benítez no frenó al ingresar a la estación de Once, donde embistió al final del andén, supo Infobae. El hecho dejó casi un centenar de heridos, ninguno de gravedad, según informaron las autoridades porteñas.

La afirmación del trabajador de la línea Sarmiento coincide con la información que brindó por la tarde el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, sobre la velocidad que registraba el tren en ese momento. De acuerdo con el funcionario, entró a 22 km/h, cuando lo permitido es 12.

Al dar detalles sobre lo ocurrido, Randazzo evitó pronunciarse en contra el maquinista, quien había sido llevado a un hospital por las heridas que presentaba. Confirmó, no obstante, que Benítez tenía entonces en su poder el disco rígido de la cabina, que contiene datos claves para esclarecer el hecho.

Al respecto, el abogado Gregorio Dalbón -que representó a una parte de los afectados por la denominada Tragedia de Once- adelantó a este medio que el lunes presentará, en nombre de más de una docena de los heridos por el caso de hoy, un pedido para que el motorman sea procesado por estrago culposo y además quede con prisión preventiva.

A juicio del letrado, Benítez debe quedar detenido por intentar obstruir a la Justicia. "No merece la libertad porque le está tomando el pelo a la Justicia y a las víctimas", indicó.

Dalbón dijo también que propondrá al juez Lijo -a cargo de la causa- que acepte a Eduardo Lucio Frigerio como perito. Se trata de un experto que ya participó en la investigación del accidente ocurrido en Castelar, meses atrás.