Un estudio realizado en República Checa sugiera que el virus de la gripe aviar H5N1, conocido por su alta virulencia, podría propagarse a través del aire bajo determinadas condiciones. Este hallazgo se produjo en el contexto de una investigación sobre un brote inusual que afectó a una granja avícola de alta seguridad en febrero del presente año. A pesar de contar con rigurosas medidas de bioseguridad, que incluían agua de pozo filtrada, ventiladores de flujo de aire unidireccional y cercas diseñadas para prevenir la entrada de fauna silvestre, la granja sufrió la infección del virus, resultando en la muerte de miles de aves.