Un estudio publicado en la revista Theory and Society aborda uno de los episodios más oscuros y enigmáticos de la Europa moderna temprana: la gran caza de brujas. Investigadores han identificado que la expansión de las persecuciones entre los siglos XV y XVII estuvo estrechamente relacionada con la difusión de ideas a través de la imprenta y las redes comerciales de la época. Este fenómeno no solo fue resultado de supersticiones populares o rivalidades religiosas, sino también de la propagación de nuevas teorías demonológicas, facilitadas por el avance de la tecnología de impresión.