Mafalda, la genial voz de nuestra conciencia
El personaje de Quino que tomó vida propia.
Este personaje no tiene una fecha de nacimiento convencional. Algunos dicen que fue allá por 1960, otros dan la precisión del 15 de marzo de 1962, pero su padre ha entregado finalmente un poco de luz señalando que el día correcto fue el 29 de septiembre de 1964, aunque esto puede llegar a discutirse.
Y si queremos ampliar la confusión, digamos que cuando nació tenía 4 años. Y hoy quizás tiene 6 o tal vez 8.
Esta niña tiene un flequillito inconfundible, neuronas bien entrenadas y muchas ideas contestatarias.
Representa la aspiración idealista y casi utópica de alcanzar un mundo mejor. Es curiosa, inquieta y muy irónica.
Está convencida del avance social de la mujer y desea estudiar idiomas para poder trabajar en las Naciones Unidas como intérprete.
Ama a los Beatles y odia a la sopa con la misma intensidad.
Forma parte de una tradicional familia porteña, su madre se llama Raquel y su padre no tiene nombre que se le conozca. Y para mejor (o peor) esta niña no nació de un vientre, nació de un cerebro. Del cerebro de Joaquín Salvador Lavado Tejón, más conocido como Quino.
Porque esta niña es Mafalda.
NACIMIENTO
El 29 de septiembre de 1964, la tira Mafalda apareció por primera vez en la Revista Primera Plana. Allí estaba también su padre.
Recién la semana siguiente aparecerá en escena su mamá. Y el 19 de enero de 1965, se sumará su amigo Felipe.
Felipe es un soñador, fanático de las historietas del Llanero Solitario, entusiasta jugador de ajedrez y amante de los Beatles como Mafalda. Este personaje fue inspirado en Jorge Timossi, un amigo de Quino que tenía dos dientes como de conejo.
En marzo de 1965, Mafalda empezó a salir en el famoso Diario El Mundo. Ya estaba por empezar el jardín de infantes. A fines de ese mes, se sumó un nuevo amigo: Manolito.
Manuel Goreiro es el hijo del gallego dueño del almacén “Don Manolo”. Representa las ideas conservadoras. Es tosco, ambicioso y de vez en cuando en sus ojos aparece el signo pesos.
Le gusta la sopa y no entiende a los Beatles. El padre lo faja cuando trae malas notas, es decir siempre.
El 6 de junio aparecerá un personaje muy muy especial: Susanita.
Susana Clotilde Chirusi es una niña rubia, con bucles. Es la contracara de Mafalda, aunque mantienen una perdurable amistad. Susanita es … Susanita.
Quiere casarse, tener muchos hijos y lo demás le importa poco.
Y tiene reflexiones cómo ésta: “Yo no sé porque a mí me va a servir ir a la escuela, si lo único que pretendo de la vida es casarme y tener hijos. Si sólo me enseñaran a leer y a sacar cuentas, bueno, eso es útil para cuando tenga que ir a hacer las compras. Pero, ¿y todo lo demás? ¿Me querés decir para qué sirve?
Parlanchina, pendenciera, racista, altanera y muy chismosa. Esa es Susanita.
En febrero de 1966 se sumará un nuevo integrante de la troupe: Miguelito.
Es un año menor que su amiga Mafalda. Muy soñador, suele atormentar a todos desde su inocencia con preguntas complejas y absurdas. Defiende a Mussolini, porque su abuelo lo adoraba. Viste generalmente con un overol con tiradores y su pelo parece, según sus amigos, una planta de lechuga.
En agosto del 67, la madre de Mafalda quedó embarazada y el 21 de marzo del 68 nació Guille, que debutará en la tira en junio cuando Mafalda se traslade a la revista “Siete Días Ilustrado”.
Guille es el único personaje de la tira que crece. Le encanta la sopa, lo que hace enardecer a su hermana, y a pesar de su cortísima edad adora a Brigitte Bardot. El personaje está inspirado en Guillermo Lavado, sobrino de Quino.
Y finalmente, el 15 de febrero de 1970, apareció Libertad. Una petisita con ideas políticas firmes contra el sistema, un tanto incendiaria en sus conceptos y la única que es más liberal que Mafalda. Aspira a una revolución social.
En 1970 también hace su irrupción un personaje secundario con uno de los nombres más ocurrentes de la historia. Es la tortuga de Mafalda, que como es muy lenta, le pusieron “Burocracia”.
El 25 de junio de 1973, por decisión de su autor, se publicó la última tira de Mafalda, pero claramente esa no fue la muerte de nadie. Mafalda volvió en muchas ocasiones especiales y siempre está entre nosotros, en cualquier souvenir, en una réplica, en una plaza, cada vez que vemos un mapamundi o un plato de sopa.
Cada vez que nos encontramos con sus salidas extraordinarias, en español, en italiano, en inglés, en francés, en guaraní o en portugués.
Mafalda anda de aquí para allá.
En 1992 se la vio en una exposición en Madrid, dos años después en Milán charlando con Umberto Eco. Diez años después volvió a Milan para una muestra itinerante llamada “De viaje con Mafalda”, que recorrió Nápoles, Venecia y Barcelona.
En agosto de 2005 estuvo en una plaza de Colegiales a la que le pusieron su nombre.
En 2008 se la vio en el subte de Buenos Aires, mirando un mural con sus historietas.
En 2009 estuvo en San Telmo, en la inauguración de su escultura.
Y en 2014 anduvo por Oviedo, España, también mirando una escultura suya.
También se la vio caminando por Francia, donde hay una calle llamada Pasaje Mafalda.
El 23 de octubre de 2009, Mafalda apareció en el diario italiano La Reppublicca para criticar las declaraciones misóginas del primer ministro Silvio Berlusconi.
Y por supuesto, se la vio muy entristecida el 30 de septiembre del año pandémico de 2020 cuando su papá Quino se alejó de este mundo.
FLASHES
Mafalda entra a su casa y ve a su madre agotada de lavar, planchar y hacer las cosas de la casa. Y le pregunta: Mamá, ¿qué te gustaría ser si vivieras?
Después de observar el mapamundi de arriba abajo y no descubrirle el sexo, le pregunta a su papá: Papá, ¿de qué sexo es el mundo?
-Pero Mafalda, ¿cómo va a tener sexo el mundo?
-Es decir, que además de todo lo que le pasa, ¿tampoco tiene sexo?
Otra vez con la madre.
-Mafalda, ¿cómo te fue en tu primer día de escuela?
-Muy bien, aprendimos un montón de cosas. Y a vos mamá, ¿cómo te fue en este antro de rutina?
La mamá llama a comer. Mafalda se sienta y ve su plato.
-¿Sopa? Justo hoy que estaba tan contenta, me das sopa.
La madre responde –Contenta o no, la tomás igual.
-Y por qué tengo que tomarla?
-Porque lo ordeno yo que soy tu madre.
-Ah, sí es una cuestión de títulos, yo soy tu hija… y nos graduamos el mismo día. ¿O no?
Con Manolito, mientras suenas los Beatles.
Manolito le dice: ¿cómo puede gustarte si no entendés lo que dicen?
Mafalda lo mira y le dice: ¿Y? a medio mundo le gustan los perros y hasta el día de hoy nadie sabe qué quiere decir Guau.
Entra la madre y están jugando Mafalda, Susanita y Manolito.
-¿Que están haciendo?
-Estamos jugando a que somos el Gobierno.
-Bueno, no vayan a hacer lío.
-Quedáte tranquila mamá, que no vamos a hacer absolutamente nadaaaa.
Y CINCO FRASES PARA CERRAR
Nadie nota tus lágrimas, tristezas, preocupaciones. Ah, pero engordá y verás como todo el mundo lo nota.
El mayor placer de una persona inteligente es aparentar ser idiota delante de un idiota que aparenta ser inteligente.
Nunca falta alguien que sobra.
No soy antisocial. Soy socialmente selectiva.
No estoy. Me compré un desierto y me fui a barrerlo.