Publican fotos inéditas de los restos del búnker de Hitler
Las tomó un fotógrafo aficionado en 1987. Las presenta un diario alemán en su edición de este viernes. Acorralado por los aliados, allí se mató el líder nazi junto a su mujer.
El diario alemán Bild publica en su edición de este viernes fotos inéditas de los restos del búnker de Adolf Hitler en Berlín, captadas por un fotógrafo aficionado de la extinta República Democrática Alemana (RDA) en 1987.
Las imágenes, calificadas de documento histórico por ese periódico, muestran las ruinas del búnker berlinés, a 68 años del suicidio del Führer -el 30 de abril de 1945, acorralado por las fuerzas aliadas en el epílogo de la Segunda Guerra Mundial- y fueron tomadas por un aprendiz de conductor de autobuses, Robert Conrad.
De acuerdo con su relato, este fotógrafo, que ahora tiene 50 años, se infiltró en las ruinas disfrazado de operario de la construcción y captó así esas imágenes secretas.
Los restos del búnker berlinés quedaron en el sector este de la capital, territorio de la Alemania comunista, cerca de la frontera con el lado occidental.
Conrad entró en el lugar aprovechando unas obras de construcción contiguas y captó las imágenes con una pequeña cámara fotográfica con objetivo de 35 milímetros.
"Era la última y única oportunidad de documentar ese lugar", dijo Conrad al Bild, ya que inmediatamente después iban a empezar las obras de construcción de viviendas y quedarían sepultados esos accesos.
Según explicó, volvió al lugar en unas treinta ocasiones, pese al peligro a ser descubierto.
El fotógrafo aficionado afirmó, asimismo, estar seguro de haber descubierto también el lugar donde Magda Goebbels, la esposa del ministro de la propaganda, Joseph Goebbels, envenenó a sus seis hijos.
Conrad aseguró no ser un "fan" del régimen nazi y haber tomado las fotografías por "fascinación" hacia esos lugares históricos.
El entonces aprendiz de conductor ejerce actualmente como fotógrafo especializado en arquitectura en todo el país.
Lo que quedó del búnker en el que Hitler se suicidó junto a Eva Braun pasó al patrimonio arquitectónico nacional para protegerlo de las excavadoras en 1992, tres años después de la caída del Muro y dos de la reunificación alemana.
En el recinto llegaron a vivir 700 personas, entre altos dirigentes, funcionarios y oficiales de las SS y se encuentra a poca distancia del Reichstag, sede del Parlamento, y la emblemática la Puerta de Brandeburgo.