Un ejército de embajadores salteños recorrió más de veinte mil kilómetros sorprendiendo a los vecinos a lo largo y ancho del país, acercando un poco de la cultura e invitando a que visiten la provincia este invierno. En cada lugar, se disfrutó de los emblemáticos vinos salteños, degustaron las deliciosas empanadas, aprendieron a bailar zambas y se deleitaron con una serenata folklórica.