Alberto Fernández participó en la cumbre del clima
El presidente argentino insistió en la necesidad de que la comunidad internacional facilite fondos a las naciones más pobres para combatir el cambio climático.
Alberto Fernández, formó parte de los 40 gobernantes internacionales invitados a la cumbre del clima liderada por Joe Biden. Entre los representantes, se destacan los mandatarios Xi Jinping de China y Vladimir Putin de Rusia, mientras desde Europa participan la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen; la canciller alemana, Angela Merkel; y el presidente francés, Emmanuel Macron "Necesitamos recordar lo que magistralmente nuestro papa Francisco suele decir, que la crisis ecológica y la crisis social son dos caras del mismo problema.
Como bien ha dicho el presidente francés, Emmanuel Macron, debemos renovar la arquitectura financiera internacional", afirmó Fernández al participar en la Cumbre de Líderes Sobre el Clima. El mandatario nacional subrayó la necesidad de "procesos ágiles y transparentes" para el acceso a fondos, así como de mecanismos como canjes de deuda externa por acciones climáticas.
Por otro lado insistió en la "reconfiguración de los análisis que hacen las calificadoras de riesgo, para no distorsionar la realidad" de los países. "Aspiro a que nuestra cumbre marque un nuevo camino; convoco desde aquí a nuestros queridos colegas de América Latina y el Caribe para que también coordinamos medias solidarias", afirmó el presidente.
La convocatoria del presidente Biden a la Argentina y a los países de la región (Brasil/Colombia,Chile/México) reconoce también la capacidad de América Latina y el Caribe para sustentar la seguridad alimentaria global, papel construido a partir de una gran dotación de recursos naturales y de capacidades posibles de ser perfeccionadas mediante la incorporación plena a la faz productiva de las dimensiones social, ambiental y tecnológica.
El territorio alberga el 46% del agua dulce y el 50% de la biodiversidad del planeta, el sector agropecuario provee 14% de los empleos totales, representa el 5% del Producto Interno Bruto (PIB), constituyendo al mismo tiempo la región exportadora de alimentos más importante del mundo. Es, por lo tanto, uno de los que da peso específico a las naciones latinoamericanas en el tablero global, y también una palanca esencial para el desarrollo dada su interacción creciente con la nueva frontera del conocimiento.