El jefe de gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Jorge Macri, ha establecido un acuerdo con la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, para llevar a cabo el traslado de 400 detenidos con condena que actualmente se encuentran en comisarías porteñas hacia cárceles federales. Esta medida se tomó tras un incidente reciente que involucró la fuga de seis presos de la Comisaría 3A, ubicada en el barrio de Balvanera. 

El acuerdo alcanzado entre Macri y Bullrich tiene como objetivo principal descomprimir la sobrepoblación en las comisarías y alcaidías de la ciudad, que se ha convertido en un tema de preocupación en los últimos tiempos. Se espera que el traslado de los detenidos se realice de manera ágil y efectiva, permitiendo así mejorar las condiciones de detención en las dependencias porteñas. 

Adicionalmente, se llevaron a cabo conversaciones entre los ministros de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona, y de la Ciudad, Gabino Tapia, para abordar la capacidad del Servicio Penitenciario Federal (SPF) de recibir a los detenidos con condena. Esta coordinación busca garantizar que los traslados se realicen a cárceles federales que cuenten con la disponibilidad necesaria para alojar a los reclusos. 

El incidente de la madrugada, donde se produjo una fuga masiva de detenidos, no es un hecho aislado. En abril del año pasado, también desde la Comisaría 3A, se escaparon dos detenidos que lograron romper una reja del calabozo. Estos antecedentes subrayan la necesidad de acciones más contundentes en la gestión de la seguridad y el sistema penal en la ciudad.