Con Foyth y Rulli como figuras, el Villarreal se consagró campeón de la Europa League
Tras igualar 1 a 1 en los 90 con goles de Moreno y Cavani, y no sacarse ventajas en el suplementario, el equipo español se impuso en una tanda interminable de penales.
A partir de sus logros en este siglo y de la cercanía que ha generado con nuestro país por haber tenido notables futbolistas como Juan Pablo Sorín, Juan Román Riquelme o Martín Palermo, es posible que se tenga una sobreestimación de lo que es el Villarreal.
Es cierto, en el último tiempo se ha convertido en uno de los equipos de segundo orden, que suele meterse entre los más poderosos, pero, de todos modos, es un club modesto y eso ensalza su triunfo.
El Submarino Amarillo, con Juan Foyth y Gerónimo Rulli como figuras, le ganó al Manchester United por penales y se consagró campeón de la Europa League. Gerard Moreno abrió la cuenta y Edinson Cavani igualó para el poderoso conjunto inglés.
Durante los primeros minutos el equipo español dejó jugar demasiado al inglés. La intensidad del conjunto de Ole Gunnar Solskjær primó durante un rato junto al respeto que ejerce su jerarquía individual. Pero, pasada la tormenta inicial, el ritmo de partido, lento, sin transiciones y muy premeditado, lo manejó el equipo de Unai Emery.
Para el Submarino Amarillo, cuanto menos se jugase en ritmo Premier League mejor. De a poco y sin desordenarse fue adelantándose en la cancha y si bien llegaba poco, cumplía su primer objetivo: jugar lejos de su arco.
Hasta que a los 29, de pelota parada, llegó la apertura del marcador para el Villarreal. Un centro desde la izquierda cayó a la izquierda de la defensa pero lejos de David De Gea, y el goleador Moreno se tiró para definir de derecha. El resto del primer tiempo y el arranque del segundo se jugó como quisieron los españoles.
Sin embargo, y sin hacer mucho más que merodear el campo del equipo de amarillo, el Manchester igualó el partido. Tras un córner, el rebote le cayó a Marcus Rashford que remató. La pelota dio en varios jugadores y le quedó finalmente a Cavani, y el hombre que no jugará en Boca, al menos este año, convirtió con el argentino Gerónimo Rulli ya vencido.
Tras el empate, Los Diablos Rojos acorralaron a su rival. Si bien no pudieron imprimirle su habitual velocidad de juego al partido durante lapsos muy prolongados, presionaron alto y no le permitieron al equipo de Emery mantener la pelota más que por unos pocos segundos.
Al United le faltó claridad, pero intentó ante un rival muy refugiado que ni siquiera atinó a contraatacar. La diferencia de jerarquía individual fue notoria, pero aún así, el Villarreal posee varios jugadores de características mixtas y sin embargo, apostó siempre a hacer pesar más lo defensivo.
El encuentro finalizó empatado en los 90 minutos, por lo que se jugó tiempo extra. Allí, comenzaron a pesar en el equipo español las modificaciones que hizo al final del tiempo regular. Con Alberto Moreno, Mario Gaspar y Paco Alcacer en cancha, consiguió salir del asedio y mantener la posesión.
De ese modo, logró ser levemente superior en los minutos adicionales y arrimarse especialmente mediante pelotas paradas. Pero todo terminó igualado y se definió por tiros desde el punto del penal. Allí, ambos demostraron una eficacia casi sin precedentes. Entre los dos equipos patearon 22 penales y metieron 21.
En varias oportunidades se han ejecutado muchos disparos, al punto de que algunos jugadores tuvieron que patear dos veces, pero pocas veces eso se dio en base a que todos metieron todo.
Luego de que convirtieran todos los jugadores de campo, Rulli se convirtió en héroe eterno. Convirtió su tiro y luego le atajó el penal a De Gea contra su palo derecho. Así como en su momento, Cristiano Ronaldo quiso atribuirse el nombre de Míster Champions, como consecuencia de los cinco títulos que logró en la máxima competencia europea, a Emery le cabe el apodo de Míster Europa League.
El DT español le dio al Villarreal su primer título internacional de su historia, pero sumó cuarto título en esta competencia. Los anteriores tres los había ganado al frente del Sevilla. Además de este logro histórico, el Submarino Amarillo consiguió un boleto para la próxima Champions League