Crece la polémica por el aumento de la carne
El Gobierno reclama retrotraer los valores. El sector culpa a las intensas lluvias. El Presidente de CICCRA, Miguel Schiariti explicó la situación por Continental
En medio de la pulseada del Gobierno por intentar contener los precios, en especial de la canasta familiar, la suba de la carne, por su alta incidencia en el índice de precios es uno de los productos más controlados por el Gobierno, que amenazó con adoptar severas sanciones con el sector.
Es que según el nuevo Indice de Precios al Consumidor Nacional Urbano, difundido el jueves por el Indec, el precio de Alimentos y Bebidas explican un 1,1 por ciento del total de 3,7% registrado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. Y la carne vacuna registró una suba de 3,2 por ciento, algo más bajo que el promedio general de 3,7 por ciento y casi igual al 3,3 por ciento del índice de Alimentos y bebidas, donde se encuadra. Junto a la fuerte presión oficial para producir una baja en los precios que generaron fuertes críticas del sector de los grandes frigoríficos a la gestión oficial, también se produjo un reconocimiento de que el precio del ganado en pie registró una suba interanual en enero del 37 por ciento y que los valores de venta al público alcanzaron el nivel sin precedentes de 11,35 pesos por kilo.
Al respecto, el Ing. Miguel Schiariti, Presidente de CICCRA (Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina) volvió a cuestionar la política oficial hacia el sector y explicó esta mañana por Continental que "en forma coincidente con la fuerte devaluación impulsada desde el ministerio de Economía, la zona pampeana ha recibido copiosas lluvias que han beneficiado a los cultivos, pero que están provocando serias dificultades en el transporte y, por lo tanto, en el normal abastecimiento de los mercados ganaderos, y esto ha generado un fuerte aumento del precio del ganado que se ha traducido a su vez en un aumento del precio de la carne".
Asimismo remarcó que "las políticas impulsadas por Moreno generaron la pérdida de 10 millones de cabezas de ganado, el cierre de 130 frigoríficos, la pérdida de 15.600 puestos de trabajo, la caída de 75% en las exportaciones, el aumento de 200% del precio al público, y la caída de 20% del consumo per cápita".
Schiariti volvió a cuestionar en "La Hora del campo" que " la paralización de las exportaciones al entregar los ROES (permisos de exportación) e intervención en el mercado de Liniers, pidiéndoles a los supermercadistas que no compren en ese mercado. Seguramente, por falta de experiencia del nuevo secretario se dio por satisfecho con la promesa del supermercadismo no funcionó, cuando en realidad, tendría que verificar si en sus compras directas han pagado los precios anteriores o han pactado precios mayores en la compra de los animales en pie”.