Denuncian salvaje represión al Encuentro Nacional de Mujeres y connivencia policial con neonazis
Acaudillando a las huestes neonazis se vio a Carlos Pampillón, dirigente de ultraderecha vinculado a Biondini. Hubo provocaciones y agresiones aisladas todo el fin de semana.
La marcha contra la violencia de género que coronó ayer el trigésimo Encuentro Nacional de Mujeres concluyó, como en tiempos de las dictaduras, con una represión de la policía bonaerense a las manifestantes que no careció de gases lacrimógenos, detenciones y ilegales y connivencia policial con organizaciones acaudilladas por reconocidos neonazis marplatenses, denunció por Continental Aylín Palacios, integrante del Frente Darío Santillán.
En La Mirada Despierta, advirtió que "La policía secuestró y retuvo mujeres". A lo largo de todo el fin de semana, hubo agresiones a militantes que organizaban pintadas, y una mujer que pernoctaba en un centro universitario de los habilitados para recibir a las más de 50.000 mujeres que participan del ENM fue hospitalizada tras denunciar que la violaron mientras dormía.
Además, la represión se concretó a las puertas de la Catedral, a donde al menos 5 mujeres jóvenes fueron secuestradas ilegalmente. Otras evidencian impactos de balas de goma (entre ellas, periodistas). Es la primera vez en las treinta ediciones del ENM que la policía reprime de este modo. Entre los neonazis que acaudillaban el apoyo policial al hostigamiento contra las manifestantes se vio a Carlos Pampillón, un dirigente de ultra derecha con estrecha vinculación con el candidato que ganó las Paso, Carlos Arroyo, de Cambiemos.