Una joven que fue víctima del robo de su teléfono móvil en el barrio de Palermo y luego extorsionada con el contenido del dispositivo, presentó una denuncia que desencadenó una investigación policial. Esta investigación llevó a la detención de tres integrantes de una organización delictiva especializada en "pornoextorsión". Este grupo criminal exigía dinero a las víctimas cuyos teléfonos habían sido sustraídos, bajo la amenaza de divulgar fotos íntimas si no cumplían con sus exigencias.