El  nuevo informe del Departamento de Estado norteamericano sobre la situación del narcotráfico en el mundo, que se emitió anoche, reveló que la producción local de cocaína en la Argentina es "pequeña, pero resulta ser un problema creciente" en el país.
A la vez, el documento sostiene que en la Argentina el aumento del consumo de drogas estaría relacionado con el incremento de crímenes violentos. Y al hacer una evaluación del combate contra el narcotráfico pone sobre relieve la necesidad de una mayor coordinación de tareas entre las fuerzas de seguridad nacionales y las provinciales.

El informe señala que si bien la Argentina trabajó para mejorar sus esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico en 2013, la "implementación de reformas operacionales fue gradual". Y destaca la necesidad de que el Gobierno dedique más recursos y capacidades para mejorar el combate contra las drogas para "abordar adecuadamente este desafío".

Al mencionar el incremento de la producción local de cocaína, el documento del Departamento de Estado sostiene que el "paco" (que tiene una base de cocaína) es "un problema particular entre los pobres". A la vez, destaca que la amplia disponibilidad de "paco" sugiere que la producción local de cocaína está creciendo en la Argentina, aunque aún de una manera "pequeña".
Esto desatará una vez más el debate que se dio en el Gobierno. El ministro de Defensa, Agustín Rossi, aseguró que la Argentina es un productor de drogas, pero el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el secretario de Seguridad, Sergio Berni, salieron a negar esas aseveraciones.

El informe mundial sobre la situación de narcotráfico que hizo Estados Unidos tiene un capítulo argentino que se difundió ayer y que contiene seis párrafos dedicados a la situación específica del país. En uno de ellos resalta que luego del incidente del avión militar incautado en 2011 por parte del canciller Héctor Timerman se retomaron "en forma limitada" las tareas de cooperación entre los gobiernos por la lucha contra las drogas. Aunque no detalla en qué áreas específicas se realiza esa cooperación.

Por otra parte, el informe del Departamento de Estado de 2014 reveló que en la Argentina existen "retrasos judiciales que continúan complicando los procesamientos" de traficantes de drogas. Pero no detalla qué dependencia o juzgado en particular incurren en ese retraso.

En un párrafo aparte, el informe del Departamento de Estado señala que hubo causas judiciales en las que se acusó de corrupción a autoridades gubernamentales.

Como algunas de las "medidas constructivas" que la Argentina podría emprender para concentrar sus esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico, el informe señala la necesidad de "mejorar la cooperación con socios internacionales".

En este sentido, menciona la necesidad de potenciar las tareas de detección del tráfico de drogas en la frontera norte por medio de equipos de radares. Y llama a las autoridades a impulsar la eficiencia de la Justicia en las investigaciones.

El informe de ayer va en línea con el duro diagnóstico que a fines del año pasado emitieron las Naciones Unidas sobre la Argentina.