Elon Musk toma el control total de Twitter
"El pájaro ha sido liberado" anunció el hombre más rico del mundo a través de un comunicado por la plataforma, confirmando que por fin había sellado el contrato con la empresa.
Elon Musk, uno de los fundadores de Tesla, finalmente completó la adquisición por 44 billones de dólares de la red social Twitter, luego de haber estado varios meses entre acuerdos legales y dudas. “Que los buenos tiempos vengan”, anunció Musk a través de un comentario en la plataforma.
El grupo de la red social confirmó el trato en la Bolsa de Nueva York este viernes por la mañana, revelando que el trato se había cerrado un día antes. Por el momento, las acciones de la empresa han sido suspendidas y dejarán de cotizar hasta el 8 de noviembre.
Se espera que Musk tome el papel de director ejecutivo mientras se busca a alguien nuevo para el cargo, sin embargo, ya despidió a varios de los antiguos miembros del equipo de Twitter, entre ellos: el director ejecutivo, Parag Agrawal; el director financiero, Ned Segal; y la responsable de política jurídica, confianza y seguridad, Vijaya Gadde.
De igual manera, el millonario, quien ha asegurado su apoyo absoluto a la libertad de expresión, aseguró que planea traer de vuelta a la plataforma a varios usuarios que en el pasado habían sido bloqueados, entre ellos el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Asimismo, le aseguró por Twitter al influencer “Catturd”, reconocido por sus polémicos comentarios a favor de Maga (Make America Great Again), que estará “investigando” por qué su cuenta no aparece al momento de buscarla en la plataforma. Con 850.000 de seguidores, es una de las cuentas más importantes para la derecha estadounidense.
Por otro lado, en respuesta a los comentarios de Musk, Thierry Breton, el Comisionado por parte de Europa para el mercado interno, respondió con un tuit advirtiéndole que el pájaro “volará con sus reglas”, haciendo referencia a la Ley de servicios digitales de la UE, que requiere que las plataformas online prohiban contenido ilegal, como el discurso de odio.