Italia arrancó la Eurocopa con una confianza asombrosa. Es cierto, no enfrentó rivales de elite, pero despachó a dos rivales que están lejos de ser de lo peor del continente con una sencillez y una calma admirables. En la segunda fecha le ganó por 3 a 0 a Suiza en el Olímpico de Roma con dos goles de Manuel Locatelli y uno de Ciro Immobile, y se transformó en el primer clasificado a los octavos de final del torneo.

La Azzurra volvió a mostrar qué pasa por un excelente momento. Superó en todo momento y bajó todo plan de juego a un equipo que tiene una historia reciente como para no menospreciar.

Tuvo un muy buen rendimiento de sus dos delanteros por afuera, Lorenzo Insigne y Domenico Berardi. Este último fue el que a los 26 armó la jugada del gol. Desbordó a toda la defensa rival por derecha y le cedió un centro atrás al volante Manuel Locatelli que llegó con confianza al área para definir.

A diferencia de lo que sucedió ante Turquía en el primer partido, el equipo de Roberto Mancini tuvo espacios. No debió trabajar ante un equipo puramente refugiado en su área, sino que pudo aprovechar espacios a la espalda de la última línea suiza. Cuando se instaló y movió la pelota en ataque mostró un gran nivel y cuando aprovechó las transiciones veloces también.

En el arranque del segundo tiempo Suiza intentó presionar con otra actitud. Pero la zozobra al conjunto italiano le duró cinco minutos. En la primera acción en la que logró salir del sofocón, marcó el segundo.

Tras un contraataque veloz, la jugada pareció entrar en un callejón sin salida, pero Immobile no se nubló, le puso pausa a la acción y se la entregó a Locatelli, quien, esta vez desde afuera del área, ubicó un zurdazo ajustado contra el palo izquierdo del arquero.

El conjunto local nunca perdió esa paciencia exasperante para el rival. Tocó y tocó sin caer en la monotonía y de ese modo evitó sufrir en defensa y generó peligro adelante. Incluso, a falta de dos minutos consiguió otro tanto.

Los delanteros se movieron y compartieron la pelota hasta que el goleador de la Lazio, Immobile, encontró el espacio para rematar cruzado contra el palo izquierdo de Yan Sommer. El 3 a 0 selló el resultado. Italia no era antes de la competencia uno de los equipos señalados como candidatos.

Más allá de su enorme historia no tiene una camada de jugadores de tanto nivel individual, pero en el arranque de la Eurocopa se ha mostrado como una de las selecciones más solventes. Juega bien, tiene efectividad e invita a verla disfrutar del juego. Con sus dos victorias consiguió una rápida clasificación que le permitirá rotar en el último encuentro frente a Gales.