Cuatro delincuentes se habían bajado de un auto para abordar una camioneta que se encontraba en marcha, aparentemente esperando a alguien o saliendo de una casa, cuando la dueña comenzó a gritar: "¡Hay una bebé!". Ante esto, para evitar mayores complicaciones, los ladrones desistieron de robar el vehículo y se llevaron algunas pertenencias.