“Tengo una bronca metafísica: yo nunca diría si Dios existe, no lo puedo saber ni yo ni nadie. Pero yo diría que Kirchner se murió a los 60 años y Videla tiene como 90 y Menéndez no se cuántos…”, manifestó indignado el filósofo José Pablo Feimann.

Asimismo, advirtió sobre la posibilidad de que el recientemente fallecido ex presidente “tenga el God Complex, el complejo de Dios, una omnipotencia excesiva. Eso es lamentable porque te desgasta mucho”. Sin embarbo, sostuvo, “Kirchner soportó durante muchos años una oposición de una agresividad única y nunca vista en Argentina, salvo en el gobierno de Perón”.

“Kirchner era muy simpático, era un flaco medio desbolado”, recordó el escritor.

“La primera alianza que él hizo fue con Luis Barrionuevo (líder del sindicato de Gastronómicos). Esa vez escribí una nota que no le gustó. Yo decía que ‘el factor Barrionuevo’ era introducir en el esquema ‘amigo’ alguien que no lo era, que sólo jugaría de su lado coyunturalmente mientras que por dentro lo iba a ir envenenando”, advirtió.

“El problema es que uno se termine identificando con aquello que quiere combatir”, resaltó Feimann en La Vuelta.

“‘Los sueños de los intelectuales como vos son muy puros pero ustedes nunca ponen las manos en la basura’, me dijo Néstor en ese momento”.

“Néstor había cambiado: se estaba volcando a la construcción territorial de la juventud. Por primera vez en años yo veo que los jóvenes vuelven a la militancia política”, aseguró el historiador.