La Corte le advirtió al gobierno que con una ley tampoco puede violar la autonomía porteña
El Tribunal entendió que las facultades no delegadas no pueden ser afectadas por ley. Fernández tenía un proyecto para tener "superpoderes pandémicos". Por Horacio Minotti.
La Corte Suprema de Justicia entregó varias "perlas" en su fallo emitido este mediodía, a favor de la autonomía porteña y de mantener las clases presenciales. Entre ellas, le dejó sentado al gobierno, que las autonomías provinciales (y en ellas incluye expresamente a la CABA) no pueden ser violadas ni siquiera, por una ley del Congreso.
El presidente Alberto Fernández había anunciado en su última alocución para informar sobre las medidas restrictivas, que enviaría un proyecto al Congreso para que una ley le permita contar con facultades delegadas, para tomar medidas de prevención de la pandemia. Esos "superpoderes pandémicos" según la Corte, deberán abstenerse de vulnerar las autonomías, para ser válidos.
En las páginas 32/33 del fallo, la Corte dice: "En definitiva, lo decidido por el Tribunal en torno a que el último párrafo del art. 10 del DNU 235/2021, a partir de la modificación dispuesta por el art. 2° del DNU 241/2021, no constituye el ejercicio de potestades constitucionales que le competen a las autoridades federales, sino que vulnera atribuciones y potestades propias de la autonomía política reconocida por la Constitución Nacional a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, torna innecesario ponderar la validez constitucional del instrumento jurídico en que se ha plasmado la norma (es decir, su carácter de decreto de necesidad y urgencia).
En efecto, la naturaleza de la fuente normativa no altera lo expresado precedentemente en relación a la distribución de las potestades en el diseño federal argentino. Es más, aun en el supuesto hipotético en que el contenido material de la regulación en estudio se instrumente mediante una ley formal del Congreso Nacional, la conclusión a que arriba el Tribunal en torno a la vulneración de la autonomía de la Ciudad de Buenos Aires se mantendría incólume".
Por lo tanto, poco efecto tendría el proyecto del presidente, incluso cuando fuese aprobado, si lo que buscaba era una delegación que le permitiese tomar medidas como la suspensión de clases presenciales, que vulnerarían el sistema federal.