La denunciante de Villa ratificó y amplió todos sus dichos frente a la Justicia
Declaró a lo largo de seis horas y dio todo tipo de detalles. Sus abogados aportaron material probatorio.
La situación judicial del delantero de Boca Juniors. Sebastián Villa empieza complicarse severamente, después de que la mujer que lo denunciara el jueves pasado por violación y tentativa de homicidio, ratificara y ampliara oralmente sus dichos ante la Justicia el día de ayer.
La joven realtó que conoció al jugador colombiano "en un bar, en el año 2020. El Bar es El Toro y queda en calle 9 de Julio de la Ciudad de Buenos Aires. Tuvimos una conexión, charlamos, bailamos, todo normal. Teníamos una relación normal. Él, igualmente, era celoso, pero celos y terminaba, nunca había visto agresividad. Así nos vimos durante un año", comenzó.
Al relatar el contexto en que produjo la violación, indicó que: "Cuando llegamos del asado, él puso un parlante y música, bailamos, cantamos y hacíamos chistes. Él estaba tomando. En un momento, dice que tiene que descansar. Nos vamos a acostar".
La mujer indicó que: "en el asado ya venían los comentarios y las miradas feas. Yo me di cuenta de que algo pasaba. Me miraba feo. Yo, la verdad, es que me llevo bien con los jugadores, él estaba celoso y me hacía comentarios cada tanto, nada grave, aunque eran habituales”, dijo.
Cuando se retiran a descansar, Villa se habría puesto violento: "Me agarra del pelo de atrás, a la altura de la nuca, y me atrae brusco hacia su pecho. Me agarra de la cara y me pregunta: ‘¿Estuvo con mi compañero o no?’. Yo no sabía de quién me hablaba”.
Aparentemente los celos de Villa estaban en relación con un supuesto amorío de la víctima con otro jugador colombiano: Edwin Cardona.
Allí vino el momento mas aberrante del relato: "me agarra a la fuerza y me penetra vía vaginal. Ya me tenía en su poder. Me tira boca arriba, pone la rodilla arriba de mi pierna... Fue muy doloroso. Le dije que me deje, que no estaba bien lo que estaba haciendo y me penetra. Fue lo más asqueroso que se pueda sentir, porque yo trataba de cerrar mis piernas, pero él me tenía ya del cuello, me asfixiaba, me agarraba la nariz, la boca. Yo no lo podía sacar de encima. De tanto forcejeo, me quedo sin aire y sin fuerza, por el cuerpo de él y la presión. Mi pelo en mi cara no me dejaba respirar ya. Yo no lo podía sacar de encima, yo sentía que era una lucha que no podía. El me sigue penetrando, yo lloraba y no podía respirar, fue un desastre”, dijo la víctima.
Además explicó que: "Yo estaba acostada boca abajo. No podía mover la cabeza ni nada de mi cuerpo, no podía respirar y él seguía. Yo sentía que él lo estaba disfrutando, no paraba y a mi me dolía todo”, dijo la mujer.