La jueza Ana María Figueroa, quien cumple 75 años este miércoles, anunció en una reunión con sus colegas de la Casación Federal que dejará de firmar sentencias mientras espera que el Senado decida si renueva o no su acuerdo por cinco años. 

Figueroa ocupaba la presidencia de la Casación Federal y formaba parte de la Sala I de dicho tribunal. Su decisión fue aceptada de forma unánime por sus colegas. Sin embargo, aún falta que el Senado apruebe su permanencia en el Poder Judicial. Hasta que se realice la sesión en el Congreso, Figueroa se apartará de su cargo, pero no renunciará.