Los turistas en Doha que se alojan en carpas de la FIFA aseguran que es “un campo de refugiados”
El Qetaifan Island Fan Village es una de las opciones de hospedaje más económicas que ofrece Qatar durante el Mundial. Sin embargo, a pesar de pagar 200 dólares la noche, los fanáticos protestan por las malas condiciones del lugar.
Para poder alojar a los millones de fanáticos que van a alentar a sus países en el mundial, la FIFA y Qatar se encargaron de la construcción de “Fan Villages” (pueblos de aficionados) para intentar que nadie se quede afuera. Entre las alternativas más elegidas se encuentran las carpas en el norte de Doha, el Qetaifan Island Fan Village. Sin embargo, lo que parecía una aventura y un buen lugar para quedarse, sorprendió a todos los huéspedes, quienes aseguran que en verdad el lugar es una “vergüenza”, “desastre”, "un robo”
Por 200 dólares la noche, te ofrecen una carpa con dos camas, una mesita de luz con una lámpara, una zapatilla para enchufar y un ventilador de pie. Todas se pueden cerrar con candado. Asimismo, el servicio incluye desayuno, conexión wifi y cambio de sábanas cada cuatro o cinco días.
Sin embargo, a pesar de las acomodaciones que tiene el lugar, los huéspedes aseguran que la falta de ventilador o aire acondicionado hace que las habitaciones sean un verdadero infierno en la tierra. "Una de las peores experiencias de mi vida. Los baños y las duchas están todas sucias. El calor es insoportable. Podrían poner aires acondicionados”, declaró un libanés que recomienda a todos “no venir aquí”.
Asimismo, una iraní, que quiso abandonar el campamento a los pocos días de haber llegado, asegura que "apenas sale el sol me voy y vuelvo cuando baja. Durante el día no se puede estar. Es como el desierto”.
Otra de las quejas de los huéspedes es la intensa luz que entra por sus ventanas a la mañana. “Pagás 200 dólares la noche y te morís de calor. A las 5.30/6 de la mañana ya estás despierto por la luz”, cuenta Nicolás, un argentino que pasó por el Fan Village. “Por lo que cuesta podrían ponerte cortinas blackout”, agrega Sebastián, otro argentino que comparte carpa con su hermano.
De igual manera, el desayuno que ofrece el servicio no ha sido bien recibido por los turistas."El desayuno es una vergüenza. Te dan una cajita con una donut dura”, protesta Roberto, un argentino que vino junto con su amigo Martín a ver el Mundial. “En los baños el otro día vi que uno escribió ‘esto es un campo de refugiados’”, cuenta su compañero entre risas.
Un intento de disfrutar a pesar de la adversidad
Aunque las condiciones del lugar no eran lo que esperaban, los turistas intentan verle el lado positivo al campamento. “Para mí está bien. Además es divertido estar aquí”, aseguró un mexicano.
Una de las cosas positivas que destacan los huéspedes del campamento es la cercanía que tiene con un FAN Fest de la FIFA y de dos playas, una pública y otra privada. Asimismo, está a seis kilómetros del imponente Estadio Lusail.