Pese a los anuncios, el gobierno no habría aumentado el ritmo de los gastos sociales
Según la entidad Reverso, no hubo un incremento en la erogación estatal en contención social después de las PASO
-Los anuncios del Gobierno nacional representan gastos por poco más de $ 100 mil millones, un 0,22% del PBI. En comparación, significa el 10% del total de gastos destinados a la emergencia por el coronavirus en 2020.
-El ritmo diario de los gastos de la finalidad Servicios Sociales (que incluye todos los gastos independientemente del ministerio que los realice) aumentó sólo 1,8% en términos reales entre septiembre y octubre.
-La ejecución de los gastos previsionales (que incluye jubilaciones y AUH) cayó 1,6%, mientras que la Promoción y Asistencia Social (principalmente la Tarjeta Alimentar y al Potenciar Trabajo) aumentó un 47,9%, pero su incidencia en el total del área es del 2%.
Luego de la derrota sufrida en las elecciones primarias, el presidente de la Nación, Alberto Fernández (Frente de Todos), dijo que escuchó el mensaje de las urnas y la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, pidió elevar el gasto social. Incluso, candidatos del Frente de Todos, como Daniel Gollan, hablaron de más “platita” para los sectores postergados.
Pese a estas declaraciones y a los anuncios que en materia económica realizó el Frente de Todos, el ritmo del gasto social en su conjunto prácticamente se mantuvo en los mismos niveles que en el período previo a las elecciones PASO, y las medidas adoptadas no representaron un impacto considerable en el Producto Bruto Interno (PBI).
Los anuncios del Gobierno
El Gobierno anunció públicamente una serie de medidas relacionadas con mejoras en los ingresos. Entre las más importantes, se presentó un aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM), un complemento mensual de las asignaciones familiares, la extensión del programa REPRO II -que asiste a empresas de sectores críticos con el pago de parte de los salarios de sus empleados-, la jubilación anticipada para desempleados y la elevación del piso salarial mínimo a partir del cual se paga Ganancias.
Un cálculo de la consultora Eco Go -que dirige Marina Dal Poggetto- muestra que los anuncios realizados por el Gobierno después de las PASO ascienden a poco más de $ 100 mil millones y equivale apenas a un 0,22% del PBI. Esto representa poco más del 10% de los casi $ 1 billón destinados a la emergencia del coronavirus durante 2020, equivalentes a un 3,6% del PBI.
Según este análisis, las principales medidas, en términos de erogaciones, son el complemento de las asignaciones familiares (0,1% del PBI) y los cambios en Ganancias (0,04% del PBI), que implican una menor recaudación por $ 20 mil millones.
Lucio Garay Mendez, analista de Eco Go, explicó a Reverso que el Gobierno no realizó mayores gastos sociales porque “tiene poco margen de financiamiento”.
Y agregó: “A principios de año hubo un fuerte ingreso de recursos tributarios por una fuerte cosecha que trajo derechos de exportación [N. de la R.: retenciones] en niveles altísimos. A eso se le sumó el Aporte Extraordinario de las Grandes Fortunas a partir de mayo, que también sumó recursos importantes. Además, había margen para pedir financiamiento monetario al Banco Central. Hoy los primeros 2 recursos extraordinarios ya no los tiene, y al Banco Central ya le pidió más de $ 1 billón. Es por esto que, al mirar la dinámica de los ingresos, se puede entender por qué los anuncios post-PASO son más limitados”, completó.
Los gastos, desagregados
Para analizar la evolución de los gastos luego de las PASO, este medio comparó el ritmo de ejecución diaria del Presupuesto. Siguiendo este criterio, el ritmo de gastos diarios correspondientes a la finalidad Servicios Sociales (que incluyen a todos los gastos sociales independientemente del ministerio que los realice) se incrementó sólo el 1,8% en términos reales (descontando el efecto de la inflación) entre los períodos enero-agosto y septiembre-octubre.
Esto significa que la ejecución presupuestaria de las principales políticas sociales del Gobierno (la finalidad Servicios Sociales engloba a las jubilaciones y pensiones, asignaciones, planes sociales y de empleo y la política alimentaria, así como también los gastos en Salud y Educación y en Vivienda y Agua potable) se mantuvo sin grandes aumentos luego de las PASO.
La finalidad de Servicios Sociales se divide en diferentes funciones. La de Seguridad Social, que incluye el pago de jubilaciones y de las asignaciones familiares y es la que más presupuesto insume (casi el 73% del total), cayó un 1,6% real en los últimos 2 meses en relación con los primeros 8 meses del año.
Garay Mendez explicó que esto se debe a que a inicios de año “la fórmula de movilidad daba aumentos bajos (por la baja nominalidad del año pasado), por lo que había mayor presión para otorgar bonos. Y ahora la movilidad empezó a ajustar a un ritmo más afín a la inflación”.
En efecto, durante la primera parte del año el Gobierno otorgó bonos a jubilados (ver acá y acá) y a beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y Embarazo (AUE), medidas con fuerte impacto presupuestario que no se replicaron luego de las primarias.
Dentro del apartado de Seguridad Social, la ejecución de la Asignación Universal por Hijo (AUH) cayó 3,7% en términos reales, mientras que las asignaciones familiares en general se incrementaron un 12,5%, impulsadas por el anuncio del Gobierno.
En tanto, los gastos diarios en Promoción y Asistencia Social (que incluye otros programas sociales) se incrementaron un 47,9%. Esta suba se explica principalmente por mayores erogaciones en la Tarjeta Alimentar (64%) y el programa Potenciar Trabajo (28%), que fue impactado por la actualización del SMVM. No obstante, según datos oficiales de la ejecución presupuestaria, estos programas tienen una incidencia de apenas el 2% en el total de los gastos sociales, en su mayoría destinados a gastos previsionales.
Reverso consultó al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación por las causas del aumento de las erogaciones de la Tarjeta Alimentar y del Potenciar Trabajo, pero al cierre de esta edición no había obtenido respuestas.
Menor ejecución de gastos
Informes de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) y de la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) coinciden en señalar que, hasta el mes de septiembre último, los gastos primarios aumentaron por debajo de la inflación (-3,2%), con una retracción del 45% en los programas sociales y del 7% en jubilaciones y pensiones.
En este sentido, el déficit primario (que confronta gastos y recursos antes de contemplar el pago de los intereses de la deuda) registrado hasta septiembre -último dato disponible- era del 1,5% del PBI, un valor inferior al 4,6% planteado en el Presupuesto 2021.
Según la OPC, la caída de los gastos en jubilaciones obedece al efecto de la fórmula de movilidad, mientras que la retracción del 45% en los programas sociales “se debe a la alta base de comparación, dada la implementación del IFE y el ATP para combatir la pandemia durante el año pasado”.
Esta nota es parte de Reverso, el proyecto periodístico colaborativo que une a más de 100 medios y empresas de tecnología para intensificar la lucha contra la desinformación durante la campaña.