Sin que sepamos, nos cuidan a todos
En un mundo cada vez más complejo, atravesado por una Pandemia, los veterinarios tienen el deber de afrontar, junto con otros profesionales, los múltiples problemas vinculados a la Salud Pública, la sanidad y el bienestar animal sin perder de vista el compromiso y la responsabilidad social para seguir transformando la realidad y contribuir a una mejor calidad la vida para todos.
Hace más de dos décadas se viene trabajando bajo la premisa de que la salud humana y la sanidad animal son interdependientes y están vinculadas a los ecosistemas en los cuales coexisten, de allí, el concepto “Una Salud”.
En la actualidad, el campo de acción profesional de los veterinarios abarca distintos ámbitos relacionados entre sí como la sanidad animal, la salud pública, la investigación en biomedicina, la inocuidad y seguridad de la producción alimentaria y el cuidado de los ecosistemas. Los temas centrales en los que intervienen están relacionados directamente con la vida humana. “El 70% de las enfermedades emergentes tienen origen animal y el 65% de las enfermedades infecciosas, que aquejan a la población humana, son zoonóticas”, señalan desde el Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires (CVPBA).
Este escenario, signado por la fragmentación y los nuevos desafíos, requiere compromiso, capacitación y vocación de servicio por parte de los profesionales de este campo, de las instituciones académicas que los forman y de los organismos del Estado.
Como en muchos ámbitos, el contexto de Pandemia permitió reconocer y revalorizar su rol; pero aún falta camino por recorrer en pos de “atender las demandas reales de la sociedad actual; donde se contemplan temas relacionados con el bienestar animal, los nuevos sistemas de producción animal y la gestión empresarial; como así también la sostenibilidad ambiental, el uso responsable de medicamentos y las enfermedades emergentes”, resumen desde el Colegio Bonaerense.
A pesar de que el avance científico ha generado un elevado grado de especialización, “el cuidado y atención de los animales de compañía es la actividad más reconocida por la población urbana, mientras que la población rural asocia al veterinario con su actividad en la atención de animales de campo”, resumen referentes del CVPBA, y agregan que “no obstante, estas son algunas de las incumbencias; el trabajo en pos de la inocuidad y seguridad alimentaria no se debe dejar de lado y es un rol no muy reconocido”.
Por último, las autoridades sintetizan que, “si bien este último tiempo se logró el reconocimiento de la profesión, aún debemos repensar la labor que se presenta por delante en cuanto al vínculo con lo que nos rodea; y así seguir revalorizando el rol profesional como agente de salud pública, garante de Una Salud”.
¿Por qué celebramos el día del Veterinario Argentino?
La conmemoración se originó el 6 de agosto de 1883 cuando se comenzaron a dictar las primeras clases de las carreras universitarias de Agronomía y Veterinaria en el Instituto Agronómico Veterinario de Santa Catalina, provincia de Buenos Aires.
En este marco, el Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires saluda a todos los profesionales veterinarios en su día. “Hoy, más que nunca, nuestro rol como veterinarios es fundamental para preservar la Salud Pública; por eso reconocemos y destacamos el trabajo de nuestros veterinarios durante este tiempo”, concluyen las autoridades.
Los veterinarios, Garantes de Una Salud