La nueva conducción de la Unión Industrial envió un mensaje conciliador hacia el Gobierno. El flamante presidente de la entidad, José Ignacio de Mendiguren, dijo que la UIA “no está para confrontar, sino para construir”.

Las declaraciones del empresario se producen en medio de la polémica del Gobierno con el eje Techint-Clarín por la participación del Estado en los directorios en forma proporcional a su porcentaje accionario. Al respecto de Mendiguren reconoció que espera que el Congreso y la Justicia se expidan sobre este tema. En este sentido, el juez Hernán Pappa dejó sin efecto las resoluciones adoptadas en la última asamblea de la compañía Siderar, que no excluyó a los representantes del Estado.

En el acto participaron Hugo Moyano, secretario general de la CGT, y Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria. De Mendiguren destacó a Roberto Rocca, de Techint, como “dirigente modelo” y reivindicó “las multinacionales argentinas”, pero también exhortó a “terminar con las antinomias entre mercado y Estado”.