1) SI a la democracia. Por los siglos de los siglos. Para que siempre decidamos todos los argentinos y que la culpa de lo bueno y de lo malo sea nuestra y nunca más de un grupo de dictadores criminales.

2) SI a la libertad. Para que seamos capaces de dar la vida para que otro diga lo que se le ocurra. Aunque sea nuestro adversario. Para que todos podamos expresar nuestros sentimientos. Le guste o no a los poderos de turno. Orwell decía que en tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario.

3) SI a la república. Solo existe con la independencia absoluta de los poderes. Para que ese equilibrio nunca se pierda en el abismo del autoritarismo descontrolado.

4) Si al federalismo. A los que defienden las lágrimas y las sonrisas de los pueblos del interior con la Constitución en la mano y la igualdad en el corazón

5) SI a los derechos humanos. Es lo mismo que celebrar la vida. Para que nadie viole la ley con ningún crimen de lesa humanidad ni de lesa inseguridad. Para que vivir en paz, desarmados y pacíficos con nuestra familia sea algo cotidiano.

6) SI a la justicia. La que no mira debajo de la venda ni tiene camisetas partidarias. Para que castigue a los delincuentes y para que nadie le robe a nadie. Para que los funcionarios rindan cuentas ante su gente y muestren sus manos limpias y sus uñas cortas.

7) SI al progreso. Y que sea producto del esfuerzo para ganarnos el pan con el sudor de nuestra frente. Para que cada vez mas haya más productores y más productos y menos desocupados.

8) SI a la diversidad. La de todos los pensamientos, colores y creencias. Todos somos argentinos y cada uno desde su lugar contribuye a hacer más rica nuestra cultura plural.
9) SI a la honestidad. Las manos limpias de nuestras clases dirigentes deberán ser el espejo de la honradez de abajo que se proyecta. De los que pagan los impuestos, de los que no roban ni estafan, de los que no se trepan al poder para traficar con nuestros sueños.

10) SI a diálogo. Porque donde no hay posibilidad de conversar no hay posibilidad de convivir. Donde no hay diálogo no hay política. Hay ojos cerrados, labios sellados y oídos tapados. Un vacío que llenan los que gritan, ordenan y condenan.

11) SI a la solidaridad. No hablo de caridad. Impulso la mancomunión de las cooperativas, la colaboración mutua, el dame una mano hermano, el en que te puedo ayudar. No hay escándalo ético mas grande que un niño se muera de hambre en el país de los alimentos.

12) Si al coraje. Una sociedad sin valientes es una sociedad cobarde. ¿Quién quiere estar rodeado de cobardes en su barrio o en su trabajo? El miedo paraliza y envenena las venas abiertas de nuestra patria.

13) SI a la responsabilidad. Hacer las cosas bien, con una actitud racional y responsable. Proteger el medio ambiente y no contaminar a nuestros hijos.

14) SI a la convivencia. El que generaliza discrimina. No se le puede atribuir ningún mal a ningún grupo en especial y mucho menos a las minorías más desprotegidas. Hay buenos y malos seres humanos en todos lados.

15) Si al sentido común. Es el más común de los sentidos. Es el que nos ayuda a ser más sabios. El que nos sirve para afrontar los dilemas éticos que se nos presentan todos los días.

16) SI a la participación. Nadie se salva solo. Una isla o una balsa solo sirve en una emergencia. Pero todos los días seguiremos rodeados de un océano de acechanzas. Hay que meter los pies en el barro de los problemas para solucionarlos. Diagnósticos sobran. Soluciones faltan.

17) Si a la educación. Es el más grande igualador de oportunidades que inventó el hombre. Es el secreto de las mejores naciones de la tierra. El ejercito más poderoso, según San Martín. Los valores garantizados.

18) Si a la ciencia y la tecnología. La investigación intelectual, el laboratorio, la creación permanente es el motor que nos mantiene vivos y nos impulsa hacia el futuro. Sin neuronas en movimiento nos quedamos en las arenas movedizas.

19) SI a la paz con todos. Para que cada pueblo de buena voluntad tenga su lugar en el suelo patrio. Y para que el intercambio de experiencias, sueños y mercaderías nos haga cada vez más fuertes y menos vulnerables.

20) SI a la excelencia. A la lucha cotidiana por superarnos y por respetar a los que saben, a los estudian para saber mas y a los que se capacitan para enseñarnos. Apuntar siempre para arriba es la energía de no renovable de lo que viene.

Si a todos los que dicen si. Dejar de lados a los negativos, a los que siembran vientos, a los que cosechan tempestades, a los que apuestas al odio, al insulto y la descalificación Si a los que creen que esta patria es posible. Veinte veces. Mil veces, si. Si a los que dicen si.