Esta mañana, cuando aún no había amanecido este día sofocante, los 200 mil usuarios del Sarmiento se quedaron sin servicio.

Sin aviso previo, la Unión Ferroviaria dispuso un paro sorpresivo y total, al cual se sumó después también el Mitre.

Largas colas se formaron en los colectivos que prestaron un servicio de urgencia, en el que la gente viaja parada por la autopista, aún cuando está prohibido viajar de pie en autopista.

Para el usuario, maltrato sobre maltrato. Otras medidas sindicales también cayeron sobre los más débiles: el trabajo a reglamento, con asambleas, de los trabajadores de la Ceamse, que nos tapona de basura a todos para presionar.

Y no dicen la verdad, porque para evitar que les dicten la conciliación obligatoria, no declaran ninguna medida de fuerza.

¿Y saben qué pasa con Edesur? Otra medida de fuerza no declarada.

¿Y a quién le importa el usuario de trenes, el vecino que paga el ABL o el que se queda sin luz cuando hay más de 35 grados?