Claudio Pizarro, el bombardero busca revancha
Convertido a los 32 años en el máximo goleador extranjero de la historia de la Bundesliga alemana, Claudio Pizarro buscará saldar en la Copa América de Argentina la deuda pendiente que tiene con una selección de Perú que lo ensalza como su capitán y máxima figura.
Convertido a los 32 años en el máximo goleador extranjero de la historia de la Bundesliga alemana, Claudio Pizarro buscará saldar en la Copa América de Argentina la deuda pendiente que tiene con una selección de Perú que lo ensalza como su capitán y máxima figura.
Aunque el 'Bombardero de los Andes' espera cerrar su exitosa carrera futbolística con una clasificación mundialista, Pizarro ha dejado en claro que en Argentina tendrá una gran oportunidad para comenzar a cobrarse la revancha de fracasos anteriores con su camiseta nacional.
El atacante emigró muy joven desde el tradicional Alianza Lima hasta el Werder Bremen alemán, de donde pasó a punta de goles al Bayern Múnich y al poderoso Chelsea inglés.
En 2008 volvió al Bremen para convertirse en el máximo goleador extranjero en la historia de la Bundesliga, un logro que selló el pasado 23 de octubre, al superar el récord de 133 anotaciones que ostentaba el brasileño Giovane Elber.
Es por ese motivo que el delantero es reconocido por propios y extraños como referente de la selección de su país e incluso puede jactarse de ser el último peruano que ha ganado la Copa Intercontinental, en 2001, con la camiseta del Bayern.
Claudio Pizarro inició su formación futbolística en las divisiones inferiores del Deportivo Cantolao, un club reconocido por ser "cantera" de jugadores locales, y debutó en la Liga profesional el 26 de marzo de 1996, con el Deportivo Pesquero, un equipo ya desaparecido de la ciudad norteña de Chimbote.
Su gran capacidad goleadora le permitió dar un rápido salto al Alianza Lima, el equipo del que es hincha y por el que jugaba cuando el Werder Bremen decidió contratarlo en 1999, luego de que uno de sus directivos lo viera anotar cuatro goles en un partido.
Llegó a Alemania y durante su primera semana anotó siete goles, convirtiéndose en el jugador sudamericano que logró la adaptación más veloz al exigente fútbol europeo, según destacaron los cronistas alemanes.
En 2001, y tras haber logrado 15 goles en 17 partidos, fue transferido al poderoso Báyern de Múnich por más de 11 millones de dólares, una cifra que devolvió con creces anotando 100 goles, hasta que en 2007 fue traspasado al Chelsea de Inglaterra.
Su paso por el equipo que entonces dirigía el portugués José Mourinho fue discreto, ya que solo anotó dos goles, por lo que volvió en 2008 al Bremen para confirmar que los lares teutones son los que mejor le asientan a su pólvora goleadora.
A pesar de haber ganado la Copa Intercontinental, así como la Bundesliga y la Copa de Alemania de 2002-2003, 2004-2005 y 2005-2006, Pizarro no ha podido repetir sus actuaciones con la selección de Perú, con la que sólo tiene 13 goles en 55 partidos.
Con esa asignatura pendiente, ahora busca que no queden dudas sobre su disposición a cambiar la historia y ha llegado al punto de afirmar que cambiaría su récord goleador en la Bundesliga por hacer una buena campaña con su selección y alcanzar la clasificación para la Copa del Mundo de Brasil 2014.
Su deseo, según ha confesado, es "regalarle a la hinchada nacional buenos resultados" y "que la selección peruana vaya por buen camino".
"Esta será mi última oportunidad de ir a un Mundial. Y también quiero hacer una buena Copa América. Si es posible, ganarla. Quiero hacer goles, pero más allá de eso, lo que importa es que el equipo gane", remarcó.
Después de lograr eso buscará cumplir su última aspiración como futbolista: cerrar su exitosa carrera ganando el título peruano que siempre le fue esquivo con la camiseta de su querido Alianza Lima.
David Blanco Bonilla.