Otra vez fue en un clásico rosarino. Unas horas después de que terminara Rosario Central y Newell's, la violencia, que no se hizo visible en el estadio, se trasladó a las calles de esta ciudad, donde murieron dos personas en episodios relacionados a la “resaca” de la celebración y ocho personas resultaron con heridas de distinta consideración

Una de las víctimas es un hombre de 40 años que recibió un disparo de arma de fuego, mientras que la otra es un joven de 22 que fue apuñalado. 
Antecedentes:  En octubre de 2013 asesinaron a un hincha de Newell ´s de 13 años.El hecho ocurrió en la zona oeste de Rosario. El chico fue baleado por jóvenes que se movían en motos y llevaban camisetas de Central. Los atacantes dispararon varios tiros, ya que la policía encontró en el lugar cuatro vainas de calibre nueve milímetros, y la víctima fue alcanzada por una bala en el tórax que le causó la muerte en forma instantánea. Los más de dos mil efectivos policiales que fueron destinados al clásico no pudieron evitar el desenlace.
 
La violencia, desde adentro de la cancha