Son las dos de la mañana y ese peculiar sonido suena y resuena en el ambiente de Linden, suburbio de la ciudad de Johannesburgo. Realmente mencionar la hora es sólo un decir, porque no importa ni horario ni ubicación, las Vuvuzelas se escuchan durante el día o la noche.

Los sudafricanos usan estas trompetas de diversos colores y diseños para alentar a su equipo preferido durante un partido de fútbol o de rugby, por mencionar algunos deportes. Pero además, fuera de los estadios, las usan para demostrar su alegría y emoción por ser los organizadores del Mundial.

Para nosotros, colombianos y mexicanos, puede no ser algo muy extraño ya que en nuestros países existe algo similar. Pero para la gran mayoría de visitantes durante el evento mundialista es algo que nunca pasará por desapercibido. De hecho, desde que llegas al aeropuerto ya ves cientos de Vuvuzelas en las tiendas o en manos de muchos aficionados.

Podría decirse que es una simple trompeta de colores, pero no, para los sudafricanos es más que eso, es un ícono, es algo totalmente necesario a la hora de ir a un evento deportivo, tanto así que cuando la FIFA consideró prohibirlas durante los partidos la polémica generada fue tal que inmediatamente se echó para atrás la propuesta.

Ahora, en cada partido, tanto quienes asistiremos a los juegos en vivo como los millones de televidentes y radioescuchas a nivel mundial tendremos que acostumbrarse al constante y a veces ensordecedor sonido que produce esta magnífica corneta ícono del fanatismo sudafricano.

Por Daniel Dionisi