Un grupo de manifestantes interrumpió el tránsito en la avenida General Paz, a la altura de la estación Miguelete, en el partido bonaerense de San Martín. La protesta de los trabajadores de Emprendimientos Ferroviarios SA (EMFER) se registraba en ambos sentidos de circulación, tanto en la mano al Riachuelo, como al Río de la Plata.

Por Continental, el delegado Ezequiel Peralta aseguró que levantaron la medida porque los ministerios de Trabajo y Transporte "se comprometieron a recibirnos. Es un gesto que estamos teniendo para llegar a un diálogo concreto, ya que venimos pidiéndolo desde hace tiempo. Hubo reuniones, pero no hubo una salida estratégica a nuestra fuente laboral. La fábrica está vaciada, no nos están depositando los aportes patronales y la producción ha bajado un 80 por ciento", describió en La Mañana.

Peralta consignó que son "ciento cincuenta operarios que dependemos hasta el momento del Grupo Cirigliano. No sé lo que opinarán ustedes del Grupo Cirigliano, pero acá adentro los trabajadores hemos visto cosas terribles", por ejemplo "cómo quemaban documentación".

Pasadas las 8.30 los manifestantes liberaron un carril de circulación pero rápidamente volvieron a cerrarlo y en el lugar había enormes demoras para el tránsito. Hasta allí llegaron efectivos de Infantería de la Policía Federal, junto al secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni.

El funcionario encabezó una negociación con los trabajadores, quecerca de las 9.30 levantaron el corte y minutos después se pudo restablecer la circulación en la autopista, aunque las demoras se mantuvieron durante la mañana.

Berni criticó la actuación de la Justicia Contravencional porteña: "Es un gran papelón porque los jueces porteños decidieron que no desalojaran porque estaban las colectoras abiertas, hace 45 minutos que estamos dispuestos para desalojar pero la Justicia no lo dispuso, es una vergüenza". Se trata de una confirmación del cambio de postura del Gobierno nacional respecto de ciertos piquetes, ya que funcionarios de esa administración durante años toleraron las manifestaciones.