Sergio "Maravilla" Martínez tuvo que cancelar su entrenamiento para la pelea del próximo 15 de septiembre contra el mexicano Julio César Chávez Jr. al recibir presuntas amenazas anónimas y ser objeto de vandalismo en su automóvil, que se encontraba en frente de su casa.

Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana en su residencia de Oxnard (California), donde tiene el centro de entrenamiento, y han obligado a sus representantes a cancelar el evento abierto al público y a los medios de comunicación el próximo martes, en Ventura (California).

Lou DiBella, promotor de Martínez, anunció en un comunicado oficial que el pasado fin de semana "Sergio recibió amenazas de parte de una fuente desconocida y el auto en frente de su casa fue dañado", informó. "Desafortunadamente, hasta que tengamos un equipo de seguridad vamos a tener que suspender todas las apariciones públicas y con medios de comunicación...", añadió el promotor de Top Rank.

El promotor estadounidense de Martínez dijo que desconocía quién estaba detrás de las amenazas y el vandalismo, y por lo tanto no implicaban a nadie en particular y mucho menos a los seguidores de Chávez Jr.

Por su parte Kevin Rooney Jr., de DiBella Entertainment, la empresa que representa los destinos boxísticos de Martínez, confirmó que "sigue firme el entrenamiento que realizaremos para la prensa, el lunes 10 de septiembre, en el Fortune Gym del Bulevard Sunset, en Hollywood, para luego, desde Los Ángeles viajar directamente a Las Vegas (Nevada), donde se va a disputar la pelea contra Chávez Jr.", adelantó Rooney.

Por su parte, Chávez Jr. entrenará en público el 30 de agosto en Las Vegas como parte de su preparación para el cartel donde defenderá ante Martínez la corona del peso mediano del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).

A pesar de los incidentes ocurridos durante el pasado fin de semana, DiBella dijo que la preparación de Martínez sigue su calendario normal y que el púgil argentino se encuentra en la mejor forma de su carrera profesional