F1: McLaren adelante en la Qualy, Ferrari en cuarta fila, Verstappen da pelea
Clasificación parejísima en Albert Park. Llegado el momento, los McLaren fueron tan rápidos como se esperaba. Verstappen sigue sacando aceite de las piedras, Ferrari no rindió en el momento indicado. Las sorpresas: Tsunoda, quinto; Albon, sexto.
Lando Norris hizo la Pole en el GP de Australia de 2025, secundado por su compañero de equipo, el local Oscar Piastri. Así, en el momento de la verdad, McLaren ratificó el favoritismo que se le adjudicó en pretemporada.
Sin embargo, la parrilla aparece como la más pareja desde 2009. Pocas décimas te llevan de la gloria a la nada y viceversa. Lo pagaron mucho los rookies: Bearman casi no pudo girar en el fin de semana por errores y la completó con una rotura de caja en el inicio de la Qualy; Lawson estuvo a una eternidad del tenaz Verstappen y quedó fuera en Q1; y Antonelli no le pudo sacar nada al Mercedes y también se quedó afuera en la primera sesión.
Max Verstappen sigue sacando aceite de la piedra que maneja, y saldrá tercero amparándose en dos excelentes sectores iniciales, aunque se derrumba en la última parte. Sobre seco, esto representaría una ventaja en carrera, pues en los dos primeros sectores están las zonas de DRS. Sin embargo, casi seguro lloverá mañana, y en este caso las defecciones del Red Bull de 2025 importarán poco ante la maestría del tetracampeón neerlandés sobre pista mojada.
George Russell asumió plenamente el liderazgo de Ferrari y largará cuarto, por delante de Yuki Tsunoda y Alex Albon. El tailandés quedó cinco posiciones adelante de Carlos Sainz Jr, pero en general los Williams se han mostrado a una uña de los cuatro equipos grandes. Asoma una temporada tan linda como la de 2013 (último año de los V8)… ojalá que no sea el preludio a un soponcio como el que vivió la F1 de 2014 a 2020, con un solo equipo peleando por los dos títulos (en la mayor parte de la era V6 Turbo Híbrida).
Ferrari, en tanto, concretó una Q3 decepcionante, en cuarta fila detrás de los sorprendentes Albon (Williams, vuela esta temporada) y Tsunoda (tras una pretemporada muy floja, Racing Bulls asoma muy bien con sus dos pilotos este fin de semana). Incluso Hamilton tuvo tiempo de mandarse un trompo en el momento clave: Lewis tuvo problemas con el auto todo el fin de semana, y se lo nota en general menos acomodado al coche que Leclerc, lo cual es lógico.
De cara a la temporada queda preguntarse si los demás autos le empardarán el rendimiento a McLaren, que en circuitos de mucha tracción y no tanta exigencia aerodinámica, como Albert Park y Sakhir, parecen tener una ventaja tan pequeña cuan incontestable.
De cara a mañana, lo más probable es que llueva. Pero en la cambiante Melbourne, un tormentón puede venir o irse en cualquier momento y de la nada. Si fuera una carrera toda sobre lluvia, el candidato obvio es Max; pero siendo Melbourne, un semipermanente pródigo en carreras locas y con el condimento de una lluvia tornadiza y variable, puede ganar incluso un Williams o un Racing Bulls.
Razón de más para no perderse el Gran Premio de Australia de F1, que se correrá desde las 3 del domingo (hora de nuestro país).