De la mano de Ernests Gulbis llegó el primer gran batacazo en el cuadro masculino de Roland Garros. En un Philippe Chatrier colmado, el letón, número 17 del mundo, superó al suizo Roger Federer, cuarto preclasificado, quien por primera vez en diez años se despidió del Abierto francés antes de los cuartos de final. Gulbis se impuso por 6-7 (5-7), 7-6 (7-3), 6-2, 4-6 y 6-3 en un partido muy intenso y se ganó un lugar entre los ocho mejores del segundo Grand Slam del año.