Independiente goleó a La Guaira por 4 a 0 y mantiene chances de clasificar
El Rojo fue como una tromba a golear a su rival del primer al último minuto del partido.
Independiente goleó a La Guaira por la Copa Sudamericana, por 4 a 0, con goles de Cumana en contra, Leandro Benegas dos veces y Andrés Roa, y con ese resultado, deberá ganarle por 2 a 0 al Ceará de Brasil en Avellaneda, para pasar fase.
Fue un vendaval Independiente. Con las características de tal, desordenado, desprolijo, pero arrollador. Lo arrinconó a La Guaira desde el primer minuto, no vaciló. ¿Jugó bien?. No se sabe, pero aplanó a su rival.
Tiene un gran problema, la definición. El primer tiempo pudo terminar 4 a 0 si hubiesen entrado la mitad de las posibilidades que tuvo, y sin embargo, debió conformarse con retirarse a los vestuarios con un magro 1 a 0, fruto de un gol contra la propia puerta del visitante.
El segundo tiempo empezó como terminó el primero, pero ahora, el Rojo acertó de entrada, Benegas de cabeza estiro las diferencias.
Y siguió, como hacía tiempo no se lo veía, siguió yendo el Diablo, y perdiendo goles también. Entre los 2 minutos del segundo tiempo y los 35 minutos, pudo convertir no menos de seis veces, pero la pelota no entraba, hasta que un desborde por izquierda derivó en un centro pasado y Leandro Fernández, que viene siendo sustancial en los segundos tiempos, la metió adentro con precisión para la definición de Roa.
Siguió sin parar Independiente, casi como si el partido recién empezara. Roa se puso a gambetear en la medialuna, lo bajaron, la pelota derivo a la derecha para Fernández, que la volvió a poner adentro para que esta vez Benegas clavase el 4 a 0.
Si bien el último tanto fue a los '90, los 5 minutos de descuento también fueron de un arrollador Independiente que pudo meter alguno más en ese corto lapso.
Quedó el Rojo a 3 puntos del Ceará de Brasil, producto del primer partido de Copa, cuando Independiente, de visitante y con uno menos, perdió 2 a 1. Se enfrentarán la semana que viene y los de Avellaneda deben ganar por dos goles de diferencia para pasar de fase. Jugando como hoy, todo puede pasar.