La vedette peruana Irina Grandez acudió a San Juan para alentar a su selección de Perú en el debut de la Copa América ante Uruguay.

Emulando a la modelo paraguaya Larissa Riquelme, desafió el gélido clima invernal cuyano con una ajustadísima musculosa y, no conforme con ello, en un momento se levantó la remera y dejó a la vista del público su portentosa delantera.