La húngara Katalin Kovacs ganó en Eton Dorney su octava medalla olímpica
La húngara Katalin Kovacs, que junto a su compatriota Natasa Douchev-Janics acabó segunda en la final de K-2 sobre 500 metros de piragüismo, ganó hoy en el canal de Eton Dorney su octava medalla olímpica y la segunda en los Juegos de Londres 2012.
Kovacs, de 36 años y que en Eton Dorney también formó parte del cuarteto húngaro que el miércoles ganó el oro en el K-4 500, elevó a ocho el número de metales olímpicos que acumula en su carrera.
La palista húngara reparte estos trofeos entre tres oros y cinco platas, amasados desde los Juegos de Sydney de 2000.
Kovacs y Douchev-Janics, que aspiraban a ganar su tercer oro consecutivo en esta distancia, fueron segundas en la final de K-2 500 por detrás de las alemanas Franziska Weber y Tina Dietze, y por delante de las polacas Karolina Naja y Beata Mikolajczyk.
La también húngara Danuta Kozak fue la mejor de largo en el K-1 sobre 500 metros femenino y se colgó el oro por delante de la ucraniana Inna Osypenko-Radomska, campeona olímpica en Pekín 2008 y que acabó segunda a 1.229 segundos, y la sudafricana Bridgitte Hartley, tercera a 1.467.
Kozak ganó su primer oro en Londres 2012 el miércoles como miembro del equipo de K-4 500 metros, con el que hace cuatro años se colgó la plata en Pekín.
La italiana Josefa Idem, que fue campeona en Sydney 2000 y que en Londres, con 47 años, disputa sus octavos Juegos, fue quinta.
Veinte años después de su último triunfo, en Barcelona'92, Australia, con Tate y Dave Smith, Murray Stewart y Jacob Clear, volvió a ganar hoy el oro en K-4 1.000 metros.
Los actuales subcampeones del mundo cobraron ventaja desde la salida para ganar la final A por delante del barco de Hungría, campeones olímpicos en Sydney 2000 y Atenas 2004, y el de la República Checa.
El equipo de Eslovaquia, plata hace cuatro años en Pekín, estuvo en la lucha por las medallas hasta el final con los checos, pero acabó en el sexto puesto, tras ser superado por Alemania y Dinamarca.
En C-2 1.000 metros, Peter Kretschmer y Kurt Kuschela se impusieron en la final para devolver a Alemania a lo más alto del podio de esta prueba que ganaron por última vez en Atenas 2004 con Christian Gille y Tomasz Wylenzek.
Los germanos ganaron la carrera con casi un segundo y medio de margen sobre los campeones en Pekín 2008, los bielorrusos Andrei y Aliaksandr Bahdanovich.
Rusia, con Alexey Korovashkov y Ilya Pervukhin, completaron el podio, tras arrebatarle el bronce en las últimas paladas a Azerbaiyán, actual subcampeón del mundo con Sergiy Bezugliy y Maksim Prokopenko y que lideró la carrera hasta la marca de 750 metros.