La policía evitó una batalla campal entre barra bravas
El operativo se dio en Puerto Madero y concluyó con la detención de 17 personas y más de 50 demorados del equipo "Deportivo Cali".
Los "hinchas" colombianos del Deportivo Cali estaban armados con facas, manoplas y cuchillos en Puerto Madero a la espera de que apareciera nuevamente un sector de la barra de Racing, los cuales ayer atacaron en la estación Gerli del tren Roca a un grupo del Frente Radical, la barra del Cali, dejando ocho heridos, uno de ellos de gravedad internado en el sanatorio Finochietto.
La Policía de la Ciudad tuvo el dato de la reunión fanáticos esta tarde en la previa al partido con Boca y mandó una patrulla a hacer la requisa. La sorpresa ocurrió una ves que llegaron y encontraron que había armas blancas de todo tipo entre cuchillas y hasta facas caseras por lo que detuvieron a 17 de ellos, y demoró a otros 50. Todo ocurrió en Grierson y Avenida de los Inmigrantes, en una de las zonas más exclusivas de la ciudad.
El lugar de reunión era un lugar estratégico dado que, no sólo tenía que ver con la cercanía del hotel donde estaba concentrado el equipo cafetero, sino también con la posibilidad de ir hacia la Costanera Sur para dar el esperado combate contra los barras de Racing. Estos días se filtro un audio de Leandro Paredes, jefe de la barra del club de Avellaneda, en el cual remarca que siguen con la intención de “cazar a cada colombiano que se cruce”.
Más teniendo en cuenta que entre los seguidores del Cali convocados en ese lugar estaban aquellos que habrían sustraído la bandera en el Cilindro de Avellaneda la semana pasada.
“Acabamos de evitar una tragedia. Vamos a pedir la intervención a Migraciones para la expulsión de quienes intervinieron porque queremos deportarlos en forma inmediata. Tenemos 50 detenidos con facas, manoplas y cuchillos”, le dijo el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D’Alessandro.
Cabe recordar que toda esta historia comenzó el miércoles pasado al mediodía, cuando un grupo de la barra de Cali identificado con un supuesto líder llamado Camilo y con la ayuda de la facción disidente de La Guardia Imperial, robó la bandera de la facción Burzaco del Cilindro de Avellaneda, adónde ingresaron con la supuesta intención de conocer el estadio.
De cualquier manera se supone que ese supuesto “comando Camilo” le entregó la bandera al líder del Frente Radical (barra brava del Deportivo Cali), llamado Frank Rojas, quién tiene mucha relación con la facción del barrio Los Perales de la barra brava de Nueva Chicago y también vínculos con la facción oficial de Los Borrachos del Tablón, la barra de River.
Para tomar precauciones y evitar que se desarrolle una batalla campal, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aries dispuso a 800 efectivos para controlar el partido entre el Boca y Deportivo Cali.