Los hinchas del Corinthians explotaron en el festejo tras la primera consagración de su equipo como campeón de la Copa Libertadores de América, con la victoria sobre Boca Juniors por 2-0 en el estadio Pacaembú.

Los "torcedores", alrededor de 40 mil en el Pacaembú y que habían encendido algunas bengalas ya durante el desarrollo del encuentro, descargaron toda su pirotécnica felicidad apenas el árbitro colombiano Wilmar Roldán pitó el final, lo que le daba al equipo paulista la primera Libertadores de su historia.

Los hinchas, en cantitos y mientras los jugadores de Boca Juniors esperaban dignamente la ceremonia de premiación, fueron nombrando uno a uno a todos los integrantes del plantel que conduce Tité, el DT, a quien también le dedicaron una ovación inolvidable.

Los mayores aplausos, sin embargo, fueron para el delantero Emerson, autor de los dos goles en la final sobre el "xeneize".

La fiesta siguió afuera y se extendió durante horas: el Corinthians se jacta de 30 millones de hinchas, y en función de lo que fue el desborde y la alegría pareció cierto.