Los días de Lionel Messi en París están complicados. La eliminación del PSG de la Champions League a manos del Real Madrid hicieron detonar una situación que ya venía madurando dadas las malas actuaciones del argentino en el equipo.

Ayer, durante el partido entre el equipo parisino y el Bordeaux, pese a la goleada con que se impusieron los locales, cada vez que Messi tocó la pelota fue silbado por todo el estadio. La misma suerte corrió el brasileño Neymar.

Mientras tanto un día antes, el portugués Cristiano Ronaldo, con quien Messi disputó el cetro de mejor jugador del siglo durante años, se convertía en el mayor goleador de la historia del fútbol profesional, con los 3 goles que la hizo al Tottenham, alcanzó los 807 tantos y superando al austríaco Josef Bican que llegó a las 805 conquistas.