En la ciudad peruana de Chiclayo, antes de emprender el regreso a Buenos Aires, Vangioni expresó que "hacemos autocrítica porque no estamos jugando bien, pero seguimos siendo optimistas. De locales tenemos que ganar sí o sí y a Tigres vamos a ir a ganar también. Ahora hay que sumar los nueve puntos. Va a ser difícil pero queremos intentarlo".

River recibirá el próximo jueves, a las 20, a Juan Aurich, hoy segundo de la zona con 4 puntos. Luego, tendrá que viajar a México, para visitar el 8 de abril a Tigres, un conjunto que en Núñez lo complicó (sacó un empate) y es líder del grupo con 7 unidades.

El equipo de Marcelo Gallardo, que está último con dos puntos, cerrará su participación en el Grupo 6 el 15 de abril, cuando en el Monumental reciba a San José de Bolivia (tercero con 3 puntos).

"Este equipo está acostumbrados a dar vuelta situaciones adversas. Todavía quedan chances. Hay que seguir trabajando y seguir mejorando. Tuvimos varias ocasiones para cerrar el partido (contra Aurich) y no lo pudimos lograr", agregó Vangioni.

El santafesino, de 27 años, analizó la situación de River al señalar que "quizás no nos llegan mucho pero cuando lo hacen, nos convierten. Y nosotros pudimos haber hecho un gol más. Esto hay que trabajarlo más para volver a agarrar la confianza que teníamos".

Sobre el partido en Perú, que se jugó en una cancha de pasto sintético, Vangioni admitió que "la cancha fue difícil, pero para los dos, porque la pelota iba más rápido y picaba raro" y además consideró que el arbitraje del paraguayo Quintana no fue bueno.

"Quedó algo de bronca porque hubo situaciones incomprensibles (del árbitro), pero no hay que buscar excusas. Ustedes evalúen los árbitros; nosotros tenemos que pensar nada más en el juego", concluyó el jugador.

River jugará con suplentes frente a Arsenal en Sarandí, el lunes próximo a las 21.10, en el encuentro que cerrará la quinta fecha del torneo de Primera División, en el que marcha quinto con 8 unidades, a cuatro del líder Rosario Central.