Mientras se propagan por toda Europa los ajustes salvajes con recortes de ayudas sociales (el último ejemplo es Gran Bretaña, gobernada por una alianza conservadora), el Banco Central Europeo prestó a los bancos de la zona euro 15.801 millones. 

Lo hizo a través de su facilidad marginal de crédito, para dar liquidez "de emergencia" a las entidades a un tasa de interés del 1,75 por ciento, lo que supone la cifra más elevada desde junio de 2009.

La utilización de esta línea de crédito de urgencia para los bancos con problemas puntuales de liquidez arrojó, durante los últimos siete días, un uso diario medio de 700 millones de euros.

Por otra parte, los bancos de la zona euro depositaron en el BCE a través de la facilidad marginal de depósito, que remunera al 0,25 por ciento estas cantidades, 14.723 millones de euros, una cifra en línea con la media habitual en los últimos meses.