Hugo Biolcati renovó su malhadada profecía de 2009.

Tras la monumental desmentida que le dio la realidad a su vaticinio de 2009 (durante 2010 se batieron records en el volumen y comercialización de cosecha, mejoró la situación de los tambos y se recuperó stock de carnes vacunas), el presidente de la Sociedad Rural reiteró que “faltará pan, carne y leche en la mesa de los argentinos, si Cristina Fernández no cambia su política agropecuaria”.

El locuaz dirigente de la derecha agropecuaria le reclamó al ministro de Agricultura, Julián Domínguez, “que se saque la careta y diga si ampara el robo a los productores en beneficio de las exportadoras”.

Biolcati lamentó que el Gobierno “se empecine en castigar y subestimar al campo”.

En tanto, su ladero Mario Llambías, presidente de Confederaciones Rurales, le pidió a Eduardo Buzzi “que no dé prioridad a los intereses de la Federación Agraria (es decir, los de los pequeños y medianos productores), sino a los de todo el ‘campo’”.