Las consultoras privadas siguen con la andanada mediática para rechazar el pedido del Gobierno de que sinceren cómo obtienen las cifras del IPC que publican.

Algunas empezaron a responder el cuestionario enviado por Guillermo Moreno; otras pidieron “más tiempo” que las cuarenta y ocho horas concedidas, y algunas dicen que recurrirán a la Justicia.

Por Continental, el jefe de la consultora neoliberal FIEL aclaró que “el INDEC no pidió el listado de informantes”, y aclaró que, “si lo pidieran, tampoco lo brindaríamos, porque es estrictamente privado”, lo cual genera todavía más dudas respecto de la fiabilidad de semejantes índices, armados sin la estructura de cientos de negocios y la capacidad de procesamiento que exigiría una medición seria.

“FIEL registró un 23 por ciento de inflación el año pasado. El tema es que se trató de una comunicación de la Secretaría de Comercio para responder en cuarenta y ocho horas (publicando los métodos y los instrumentos con los cuales miden el IPC), so pena de multas”, se quejó Juan Luis Bour.

“Incluso hay errores en la solicitud. Es una intimación para presentar una cantidad de datos. FIEL es anterior al INDEC en la medición de índices en la producción industrial y salarios, y es posterior a la medición de precios. Pero uno empieza a medir precios porque la inflación oficial no correspondía con los datos reales”, recordó en Magdalena Tempranísimo.

“Pensar que la economía se maneja como la policía es una visión un tanto particular”, señaló, intentando desviar el tema de su negativa a publicar la metodología utilizada, algo básico en cualquier trabajo académico: hasta el cuestionado INDEC publica su metodología.

“Es algo que no pueden hacer por ley. Si sucediera, dejaremos de medir el índice, porque no podemos poner en riesgo a los locales donde medimos”, asombró.

En cuanto a la inflación de enero, Bour la estimó “entre 1,8 y 1,9 por ciento”.